Después de que le diagnostiquen cáncer de pulmón, María Jiménez tiene un tratamiento de quimioterapia oral en pastilla que se toma a diario en su casa. En esa primera fase, físicamente no se le nota nada, pero con el paso del tiempo comienza a notar los efectos del tratamiento. "Se me caía el pelo a mil", cuenta la propia María Jiménez, que detalla cómo al cepillarse el pelo comenzó a notar cómo le caía.
"Llamé a mi peluquero y le dije, 'ven aquí y córtame el pelo a ras'", destaca la artista, que muy valiente decidió raparse al cero. "Lo que llevo es una peluca, señores", afirma María Jiménez tajante mirando a cámara: "Y estoy encantada de la vida, no puedo hacer otra cosa".
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El reportero visitaba la sede en Madrid de esta 'megainstitución' para conocer todos sus secretos gracias a Luis García Montero, su director, y Victoria Rubini, jefa del Departamento de Promoción Cultural.