Bárbara Rey acaba el relato de su vida en el episodio final de 'Una vida Bárbara' de esta noche en Antena 3 en el que cuenta un periodo oscuro de su vida. En la década de los 90 a los problemas económicos se suman el espionaje y el chantaje por su relación con el rey hasta que en 1997 sufre un robo en su casa que le hace temer por su vida. Se habla de las grandes sumas de dinero que la vedette habría recibido, pero ella lo niega.

'Los años bárbaros' es el título del último capítulo de la serie documental 'Una vida Bárbara' que Antena 3 emite en prime time. En él, veremos que la relación de Bárbara Rey con don Juan Carlos tiene una segunda vida en la década de los 90, años de esplendor en los que la Expo de Sevilla y las Olimpiadas de Barcelona pusieron a España en el mapa. Sin embargo, a nivel profesional, fueron los años más complicados para la actriz que no consigue retomar su carrera y pasa verdaderos apuros económicos.

En el ámbito personal, la intimidad con el rey sigue creciendo hasta que llegan los primeros sobresaltos. Su desesperación le hará aceptar consejos de influencias negativas y terminará denunciando en televisión las presiones que sufre, el espionaje y los chantajes. La actriz llega a sufrir amenazas de muerte y en 1997 sufre un robo en su casa en el que desparecen fotos y vídeos. Tal y como explica el periodista Javier Chicote "el Estado cede a un chantaje que consiste en pagar 600 millones de pesetas" a Bárbara Rey. Si lo recibió o no "sólo lo sabe ella", asegura el presentador José Manuel Parada.

Ahora, en una entrevista de más de 20 horas que se condensa en la serie documental 'Una vida Bárbara', la artista da su versión de todo lo que sucedió y desvela si grabó o no al rey, quién espiaba a quién y se recibió el dinero que se dice que se destino a comprar su silencio.

Imagen de archivo de Íñigo Errejón.

Llevaba desaparecido casi tres meses

Errejón, increpado de fiesta por varios clientes a días de su declaración por presunta agresión sexual

El contexto El exportavoz de Sumar fue visto una semana antes de su declaración ante el juez en un local de Madrid. Errejón llevaba desaparecido desde hace casi tres meses, después de que Elisa Mouliaá presentase una denuncia contra él.