Así es el nuevo sistema de contraseñas que usa emoticonos

Las contraseñas son un auténtico tostón y, aunque nos cansamos de recomendar que se elijan las que sean más potentes y seguras, es imposible mantener un buen control de las decenas de servicios en las que estamos inscritos.

Muchos tienen la misma en todos los lados y otros acaban teniendo el peligroso archivo de bloc de notas con las suyas apuntadas. O, peor aún, un papel de mala muerte encima del escritorio.

Un equipo de la Universidad de Plymouth ha desarrollado GOTPass, que añade al patrón de desbloqueo tradicional de Android una capa de seguridad basada en emoticonos, haciendo que nos olvidemos del número PIN o de las contraseñas con muchos caracteres, símbolos y combinación de mayúsculas y minúsculas.

Después de que el usuario desbloquee el dispositivo con su patrón habitual aparece una cuadrícula con 16 emojis, de los que se tiene que elegir dos para continuar el proceso. Una vez elegidos los correctos, aparece un código de acceso que se genera cada vez que desbloqueamos el terminal.

Es un buen refuerzo al sistema de acceso clásico de los teléfonos Google que, aunque es bastante bueno, flaquea por los patrones tan sencillos y predecibles que solemos elegir.

El proceso puede sonar algo tedioso, pero las imágenes y los patrones son más fáciles de recordar que las contraseñas largas. Además, podría ser útil el uso de este sistema en aplicaciones o webs con información sensible, como las de banca online. Y es mucho más barato de utilizar que otros sistemas más sofisticados.

En las pruebas realizadas por los investigadores, los 'hackers' solamente quebraron el sistema en 23 de cada 690 intentos, lo que muestra un 97% de eficacia. Un dato que aumenta cuando, en un análisis más detallado, se demostró que 15 de los 23 aciertos fueron una mera coincidencia.

A pesar de que estamos un poco hartos de las contraseñas, una encuesta entre expertos de seguridad augura que será el método más usado hasta, al menos, 2025. A pesar de los robos masivos de estas que se producen, como los de Ashley Madison.

Así que, mientras se generalizan los lectores de huellas y otras formas de reconocimiento biométrico, como el iris o el escaneo de las facciones de la cara, tendremos que seguir reforzando la seguridad de nuestras contraseñas... aunque sea gracias a la flamenca de WhatsApp y otros emojis