Por qué no es ninguna tontería probar las versiones ‘lite’ de tus apps favoritas

Tiempo atrás, Twitter presentó Twitter Lite, una versión ligera de su aplicación orientada especialmente a teléfonos de muy baja gama y a países en vías de desarrollo, con peores infraestructuras de redes. No tenía mucho misterio: la app se basaba en la web móvil, y simplemente funciona.

Sorprendentemente, la existencia de versiones 'lite' de aplicaciones populares está convirtiéndose en tendencia más allá de Twitter… y cada vez son más interesantes para el grueso de la población.

Pero, ¿qué las convierte en alternativas interesantes?

Lo primero, su velocidad, porque al eliminar de ellas las capas superfluas, quedan como resultado apps fluidas y efectivas.

Lo segundo, el espacio, porque en smartphones de 8 o 16 GB es imperativo optimizar el espacio. La app de Facebook 'normal' para Android ocupa 68 megas, mientras que su versión lite apenas utiliza 1,5 megas. Si esto se aplica a varias apps tenemos la diferencia entre poder grabar un vídeo tranquilamente o tener que parar la grabación a los veinte segundos por falta de espacio, por ejemplo.

Lo tercero, no requieren actualizaciones: al ser interfaces web, todo ocurre en segundo plano y sin que nosotros tengamos que hacer nada. En ocasiones, incluso, hasta tienen alguna función extra desmarcada de las versiones normales.

Es lo que ocurre con YouTube Go, que permite descargar vídeos para verlos offline. Esta app, por cierto, sólo ocupa 9 megas. Skype también tiene su versión lite, y con ella también puedes chatear, hacer llamadas de voz, videollamadas e incluso videollamadas grupales. Hasta tiene reducción del uso de datos para las llamadas o videollamadas en el caso de que tengamos que hacerla sin Wi-Fi.

La mencionada Facebook tiene también un buen número de opciones propias a la vez que un espíritu simplificado. Hasta los colores de su icono están invertidos. También es extraordinariamente ligera Facebook Messenger Lite, que ocupa menos de 10 megas y además es compatible con cualquier teléfono con Android 2.3 o superior, versiones obsoletas que la mayoría de desarrolladores ya dejaron atrás.

La de Twitter Lite, con la que arrancaba el artículo, se lleva la palma: 0,45 megas.

Quizás sea buen momento para ir probándolas y dándoles una oportunidad, incluso si tienes un Note 8 o un Pixel 2 XL puedes agradecer sus ventajas.