CORRIENTES DE AIRE FRÍO FAVORECERÍAN LA HABITABILIDAD EN OTROS MUNDOS
El 'aire acondicionado' puede tener el secreto de la vida extraterrestre
En exoplanetas anclados por marea que giran alrededor de estrellas enanas rojas, unas corrientes convectivas de aire acondicionado desde la zona fría hasta la cálida podrían favorecer la habitabilidad.
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¿Dónde debemos buscar exoplanetas rocosos, con agua y de un tamaño similar a la Tierra? Los astrónomos creen que estas ‘Tierras 2.0’ se deberían buscar alrededor de estrellas enanas rojas porque son las más abundantes en nuestra galaxia. De hecho, ya se han encontrado exoplanetas tipo Tierra alrededor de estas estrellas.
Lo que sucede es que como son estrellas más frías que las tipo Sol, los mundos potencialmente habitables necesitan orbitar más cerca de su estrella para poder albergar agua líquida.
Pero esto, a su vez, conlleva un problema: los exoplanetas con órbitas tan cercanas suelen estar anclados por marea, esto es, uno de sus hemisferios siempre está mirando a la estrella por lo que está dominado por el día y el otro, la cara oculta, vive en una noche continua. Esta dicotomía planetaria es un reto para los astrónomos porque claro, ¿cómo se pueden buscar signos de habitabilidad en estos mundos extremos?
Según una nueva investigación no está todo perdido: dependiendo de las interacciones entre la superficie del planeta anclado por marea y su atmósfera, se podrían generar corrientes de aire frío hacia las zonas cálidas creando zonas de habitabilidad.
"El aire frío se transporta desde el lado nocturno al diurno, donde se va calentando gradualmente por la estrella, elevándose a las capas superiores de la atmósfera donde se transporta de nuevo hacia el lado nocturno", comenta la astrónoma Ludmila Carone de la Universidad de Leuven en Bélgica.
Sin embargo, esta 'situación ideal' puede verse obstaculizada por fuertes corrientes de aire en las capas más altas de la atmósfera sobre el ecuador del exoplaneta que podría bloquear el flujo de aire de retorno entre el hemisferio cálido al frío, haciendo que una parte del planeta siga siendo un horno y la otra un congelador.
No todo son malas noticias porque, según los modelos, cuando se trata de un exoplaneta rocoso con superficies que tienen un alto grado de fricción sobre las atmósferas no se forman esas fuertes corrientes en la atmósfera superior, haciendo que este ‘aire acondicionado’ que favorece la habitabilidad fluya eficazmente.
"Nuestros modelos muestran que la fricción entre la superficie del planeta y las capas bajas de la atmósfera pueden suprimir las fuertes corrientes de aire", explica Carone. Así que, a mayor fricción, mejor circulación de las corrientes de aire. Y, ¿cómo se favorece la fricción? Con grandes sistemas montañosos en el exoplaneta y, por lo que sabemos, los planetas con grandes montañas son posibles...
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