UN ESTUDIO INTRODUCE LA POSIBILIDAD
La lunática idea de que la Luna debería ser un planeta
¿Qué ocurriría si nos dicen que la Luna no es un satélite sino un planeta por derecho propio? Un científico ha desarrollado un modelo teórico para reinterpretar la definición de planeta, donde una de las consecuencias es que nuestra Luna dejaría de ser un satélite para convertirse junto a la Tierra en un 'planeta doble'.
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¿Puede la Luna ser un planeta? Según un modelo creado por Jean-Luc Margot de la UCLA en Estados Unidos, la respuesta es que sí. Remontémonos a 2006, cuando la IAU (Unión Astronómica Internacional) adoptó la nueva definición de planeta, donde un cuerpo debería cumplir estos requisitos debía serlo:
- Orbitar una estrella
- Tener la masa suficiente como para que su gravedad supere la forma del cuerpo rígido -esto es, debe ser prácticamente esférico-.
- Tener limpia su zona orbital de planetesimales.
Tal y como contamos en su día, esta nueva definición dejó fuera a Plutón, que pasó a ser un planeta enano.
La cuestión es que ahora Margot ha propuesto una definición matemática, expuesta en la XLVII Reunión de la División de Ciencias Planetarias celebrada en National Harbor, y que ha sido publicada en el artículo 'A Quantitative Criterion for Defining Planets' (J.L. Margot, 2015, arXiv:1507.06300). "Quiero una clasificación que se aplique tanto al sistema solar como a los exoplanetas, algo riguroso y fácil de implementar, que no tengamos que esperar a que los viajes interestelares obtengan imágenes de alta resolución", explica.
El modelo de Margot se basa en la definición de una masa crítica que cumpla el tercer requisito de la IAU: limpiar su zona orbital de plentesimales. Por encima de esta masa crítica, la gravedad de un planeta es lo suficientemente potente como para hacerlo. Y saber si un planeta está por encima de esa masa crítica es bastante simple: sólo hay que tener en cuenta la masa de la estrella y el tamaño de la órbita del planeta.
¿Y qué ocurre? Que nuestra Luna cumple esa masa crítica y, por lo tanto, según el análisis de Margot, nuestra Luna sería un planeta, siendo nuestro sistema Tierra-Luna considerado como un planeta doble. "Debemos tener cuidado porque La IAU no ha definido el término 'satélite'. Cuando lo hagan tendrán que considerar los planetas dobles frente a los satélites", explica. Aunque este debate no se reabrirá hasta la próxima reunión de la IAU, prevista en 2018 en Viena.
Con este modelo Plutón seguiría siendo un planeta enano. Y la verdad, no parece muy lógico hacer que nuestra Luna sea un planeta y que Plutón siga sin serlo, principalmente por dos motivos.
Por una parte, la sonda New Horizons ha revelado que Plutón es un planeta complejo y dinámico, mucho más incluso que otros planetas del sistema solar. Por otra, La Luna no tiene un origen independiente como Plutón, ya que la teoría más aceptada sobre la formación lunar afirma que nuestro satélite se formó a raíz de los despojos que surgieron de nuestro planeta tras un impacto con un cuerpo del tamaño de Marte.
¿Qué pensará la comisión de la IAU cuando Margot le proponga este modelo? No parece que lo vayan a tener mucho en cuenta porque, atendiendo a prioridades, los astrónomos, así como la opinión pública, querrían ver a Plutón como planeta antes que a nuestra propia Luna.
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