Quieren enviar al espacio naves-laboratorio con los ingredientes necesarios para crear vida

La Vía Láctea podría albergar miles de millones de planetas potencialmente habitables en los que, hasta donde sabemos, no hay ningún ser vivo. Un científico alemán apuesta por enviar a esos mundos pequeñas naves cargadas con los ingredientes químicos necesarios para crear vida, según explica en un estudio publicado en 'Journal of Physics Communications'.

Claudius Gros, de la Universidad Goethe de Frankfurt, basa sus ideas en el proyecto Starshot del programa Breakthrough Initiatives, que propone enviar diminutas sondas al sistema Alfa Centauri para tomar fotografías de la estrella más cercana al Sol. Los vehículos serían extremadamente ligeros y estarían impulsados por chorros láser emitidos desde la Tierra contra una especie de velas instaladas en estos objetos -superficies espejadas que la reflejan la luz-.

Sin embargo, el investigador cree que este sistema podría servir para propulsar una carga más pesada. Su proyecto Génesis plantea el lanzamiento de una especie de kits autónomos para la vida: versiones miniaturizadas de laboratorios biológicos. Estos emisarios científicos albergarían cultivos de genes y células fabricados a partir de ingredientes químicos y los diseminarían por planetas habitables como algunos de los que orbitan la enana roja TRAPPIST-1.

El científico ha concebido también una técnica de frenado para que las naves se detengan y puedan posarse en su objetivo suavemente. Se trata de otro tipo de velas, esta vez capaces de producir un campo magnético que pueda parar los vehículos al recibir el impacto del polvo espacial.

Según sus estimaciones, una nave de una tonelada y media equipada con velas de 50 kilómetros de ancho podría alcanzar TRAPIST-1 en 12.000 años si fuera impulsada por los láseres que el equipo de Starshot está desarrollando. Lo malo, que aunque desde el proyecto no creen que el proyecto del alemán sea imposible, apuntan a que se trata de una iniciativa difícil de financiar, sobre todo por su larguísima duración.