SALUD

¿Cuáles son los primeros síntomas del Alzheimer y cómo podemos prevenirlos?

Esta enfermedad afecta a 800.000 personas en España y no tiene cura, pero los hábitos que te mostramos reducirán el riesgo de padecer Alzheimer.

Según la Alzheimer’s Association, el Alzheimer es “la forma más común de demencia, un término general que se aplica a la pérdida de memoria y otras habilidades cognitivas que interfieren con la vida cotidiana”. Se trata de una enfermedad neurodegenerativa progresiva que afecta a 800.000 personas en España, según datos de la Sociedad Española de Neurología.

Se diagnostican cada año 40.000 nuevos casos y solo el 1% de los pacientes, aproximadamente, tiene precedentes genéticos de la enfermedad. Por lo tanto, es muy importante conocer sus primeros síntomas y qué hábitos podemos tomar en nuestro día a día para evitar que en el futuro podamos vernos afectados por esta enfermedad.

Estos primeros signos de Alzheimer son cambios en la personalidad, bajo nivel de energía, deterioro en la capacidad de movimiento o al caminar, pérdida de memoria, cambios de estado de ánimo, problemas de atención y orientación o incapacidad para resolver operaciones aritméticas sencillas.

Desafortunadamente,aún no existe una cura para esta enfermedad que afecta a tantas personas, pero sí podemos tomar por costumbre ciertos hábitos que reduzcan el riesgo de padecerlo. Distintos estudios poblacionales han demostrado que el estilo de vida es un factor importante a la hora de determinar la probabilidad de padecer Alzheimer. Uno de estos estudios, publicado en la revista Neurology, revela que llevarun estilo de vida saludable reduce este riesgo.

Elestilo de vida saludable que menciona el estudio consta de varios hábitos. El primero de ellos es el control de los factores de riesgo cardiovascular, como el colesterol, la obesidad, el tabaquismo o la hipertensión. Otros hábitos importantes que debemos incluir en nuestras rutinas es llevar una dieta saludable, hacer ejercicio físico moderado, procurar tener un sueño reparador y desarrollar actividades mentales que nos ayuden a tener una mente más ágil. Por supuesto, no debemos olvidar cuidar nuestra vida social ya que una vida social activa nos hará trabajar las conexiones neuronales.

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