POR LA BOCA VIVE EL LÍDER
El ancho de la boca, clave para ser un buen líder
Un experimento canadiense concluye que la capacidad para ser un buen dirigente masculino está escrita en el rostro de los candidatos, a juzgar por el efecto que producen sus imágenes.
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En plena carrera presidencial estadounidense, muchos se preguntan si la trayectoria del republicano Donald Trump ha ido demasiado lejos o de si es una broma macabra que terminará en algún momento. Pues bien, el éxito de este señor quizá no esté ligado a su poder económico o a sus brabuconadas.
Un grupo de psicólogos de la Universidad de Toronto afirma que el ancho de la boca se asocia con el liderazgo. Pero, ojo, solamente han estudiado el efecto que provocan los rasgos faciales de los hombres de raza blanca, por lo que hay que poner una falta al estudio por no contemplar casos de mujeres o de otras razas -según ellos la elección viene determinada por su abrumadora presencia en los puestos de poder-.
Este estudio se basa en investigaciones previas en las que se pidió a dos grupos de personas evaluar, a partir de fotografías, la eficacia de la gestión y el éxito económico de los consejeros delegados de algunas empresas. Sorprendentemente la mayoría de las personas eligieron como “líderes” a los que obtenían más beneficios en la realidad. Una correlación imagen-éxito que aparecía también aunque las fotos que mostraban a los participantes de la investigación eran de muchos años antes de acceder al cargo.
Pero los investigadores canadienses quisieron ir más allá, ya que los estudios anteriores no trataban de determinar qué característica de los rostros era fundamental para tener garantía de éxito. Simplemente han apuntado ideas genéricas como los rasgos “más masculinos” y, a nivel de rostro, han valorado la mandíbula y el ancho de la boca. La tésis principal es que un gran orificio bucal es señal de ser un líder.
Para ello han hecho cuatro experimentos basados en rostros de hombres, y sus conclusiones han aparecido publicadas en 'Journal of Experimental Social Psychology'.
En el primer experimento se presentó a cincuenta hombres que tenían que ser calificados en una escala del 1 al 7 en función de lo que el panel de muestra consideraba su nivel de liderazgo. A continuación se repitió el mismo experimento con veinte hombres cuya boca había sido retocada -ampliada o reducida en un 10%-. A mayor tamaño bucal se percibía mayor sensación de autoridad por los participantes en el estudio.
En la tercera prueba los psicólogos seleccionaron fotografías de los CEOs de las veinticinco empresas más importantes de EEUU, según la 'lista Fortune'. También se concluyó que, a mayor cavidad oral, mayores beneficios.
En el último experimento los autores del estudio se interesaron por los políticos, repasando 68 elecciones al Senado y otras tantas a gobernador. En el primer caso, la longitud de la boca fue significativa en cuanto al resultado de la votación, aunque no en el segundo caso.
Los autores concluyen que el ancho de la boca puede ser una señal válida de liderazgo y éxito en los varones blancos occidentales. Aunque esperemos que, en el caso de Trump esto no se cumpla y que su boca solamente le sirva para... decir barbaridades.
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