LA LUZ ARTIFICIAL AFECTA A NUESTRO RELOJ CIRCADIANO
Así afecta a tu salud quedarte todo el día en casa
Quedarte todo el día en casa o en la oficina bajo toda esa luz artificial está afectando a tu reloj circadiano interno, que le dice a tu cuerpo cuándo debe prepararse para dormir y cuándo debe estar despierto.
Publicidad
Estar apenas una sola semana expuestos a la luz natural durante una acampada en las montañas fue suficiente para sincronizar los relojes circadianos de ocho personas que participaron en un estudio de la Universidad de Boulder en Colorado (EE.UU.) La investigación evidenció que la sincronización de los relojes internos de los participantes se produjo independientemente de si se trataba de personas madrugadoras o trasnochadoras en su día a día.
"Lo que es notable es cómo, cuando estamos expuestos a la luz solar natural, nuestros relojes se sincronizan perfectamente en menos de una semana", afirma Kenneth Wright, líder del trabajo.
Y es que los dispositivos eléctricos de iluminación, cuyo uso se extendió masivamente en la década de los años 30, ha afectado por contra nuestros relojes circadianos internos que le dicen a nuestro cuerpo cuándo debe prepararse para dormir y cuándo debe estar despierto. El simple gesto de accionar un interruptor e inundar una habitación de luz permite que los seres humanos estemos expuestos a la luz mucho más tiempo de lo que de forma natural tendríamos sin iluminación artificial.
Incluso cuando estamos expuestos a las luces eléctricas durante el día, la intensidad de la iluminación interior es mucho menor que la luz del sol y el color de la luz eléctrica también se diferencia de la luz natural. Por ello, para cuantificar los efectos de la luz eléctrica, los investigadores supervisaron a un grupo de ocho participantes (con una edad media de 30 años) durante una semana en el campo, mientras registraban la intensidad de luz a la que fueron expuestos y su actividad. La única iluminación permitida fue la luz solar y la luz de una fogata.Ni linternas ni dispositivos electrónicos.
Al final de los siete días, los expertos también registraron los tiempos de los relojes circadianos de los participantes en el laboratorio mediante la medición de la presencia de la hormona melatonina (una de las formas en las que el cuerpo señaliza el inicio de la noche biológica: los niveles de melatonina aumentan por la noche y disminuyen por el día).
De promedio, el comienzo del periodo de oscuridad biológico comenzó poco antes del ocaso y terminó al amanecer. También despertaron justo después de que su noche biológica hubiera terminado.
Al vivir en este mundo moderno con ambientes construidos, tenemos la oportunidad de encontrar una gran cantidad de diferencias entre los individuos. Algunas personas son más de vivir el día y a otras les gusta aprovechar la noche. Lo que hemos descubierto es que los ciclos de luz-oscuridad naturales proporcionan una fuerte señal que reduce las diferencias que vemos entre las personas, eliminando dramáticamente esta oposición entre noctámbulos y madrugadores gracias a la simple luz del Sol.
Publicidad