Los efectos de la resaca en tu cerebro continúan incluso cuando no hay alcohol en sangre

Dolor de cabeza, sequedad en la boca, tal vez vómitos… Son algunos de los síntomas que experimentan las personas resacosas el temido día después de una ingesta masiva de alcohol. En unas horas (muchas horas) se suelen pasar los efectos, por lo menos los que más notamos. Porque un nuevo estudio asegura que la resaca sigue en nuestro cuerpo tiempo después.

Una investigación de la Universidad de Bath (Reino Unido) concluye que se han detectado deficiencias en el sistema cognitivo después de que el alcohol haya desaparecido del torrente sanguíneo. Así, se verían afectadas la coordinación, la velocidad o las habilidades motoras. También, aquellas personas que creen que ya se encuentran bien podrían experimentar fallos en la memoria a corto o largo plazo o la atención.

Esto supone cambios en todo lo que conocíamos sobre la resaca. Así, los psicólogos encargados del estudio sugieren que algunas empresas deberían revisar las orientaciones que en materia de seguridad laboral tienen para sus trabajadores. Por ejemplo, si hasta ahora muchos han esperado para conducir hasta que han creído que no había alcohol en sangre, ahora se sabe que la percepción puede estar equivocada y que habría que esperar más.

Craig Gunn, autor principal del estudio y miembro del departamento de Psicología de la Universidad de Bath, ha alertado de que hay “limitadas e inconsistentes” investigaciones sobre la resaca y que se necesitan más estudios acerca de sus efectos. De hecho, el equipo está ahora ampliando su investigación para conocer los costes económicos y otros riesgos asociados. Incluso ,están pidiendo voluntarios que sepan que van a tener los síntomas tras un día de fiesta.

No es un asunto baladí: se estima que el absentismo laboral provocado por las resacas cuesta cada año 1900 millones de libras esterlinas (1636 millones de euros) a la economía británica. Sally Adams, otra de las autoras del estudio, lo resume así: “La resaca tiene implicaciones a nivel individual desde el punto de vista de la salud y el bienestar, pero también más amplios a nivel nacional para la seguridad y la economía”.