UNA PISCINA PÚBLICA PUEDE TENER HASTA 75 LITROS DE PIS
Hacer pis en la piscina puede intoxicar a los bañistas (y te explicamos por qué)
Las reacciones químicas que se producen entre el pis, el sudor y el cloro de las piscinas aumentan el riesgo de asma y otros problemas respiratorios.
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Orinar en las piscinas es mucho más común de lo que podríamos pensar ‘a priori’. Un estudio elaborado en Canadá estimó que en una piscina pública de gran tamaño (de alrededor de 830.000 litros de agua) había unos 75 litros de orina, una cantidad suficiente para llenar un cubo de basura de tamaño medio.
Aunque podemos pensar que el cloro, usado para la desinfección de las piscinas, lo neutraliza, la realidad es que ambas sustancias crean una reacción química perjudicial para los humanos.
El producto principal de este proceso es el tricloruro de nitrógeno, también conocido como triclororamina, que se produce cuando la urea, compuesto químico cristalino e incoloro presente en la orina y el sudor, reacciona con el cloro.
Esta sustancia, que es, en gran medida, la responsable del olor de las piscinas (y no el cloro, como se suele pensar), provoca irritación en los ojos y aumenta el riesgo de padecer asma y otras molestias respiratorias.
Además, al ser un químico volátil, que se transforma en gas y pulula por el ambiente, también afecta a quienes estén próximos a la zona de baño. Así, un estudio demostró que trabajadores de piscinas, como socorristas o monitores, tenían un mayor índice de problemas respiratorios que, por ejemplo, el personal administrativo.
Como solución, los autores de un trabajo publicado en Process Safety and Environmental Protection sugieren reducir al máximo los niveles de cloro de las piscinas, con el fin de disminuir la cantidad disponible para la reacción.
Sin embargo, los datos recogidos por los investigadores fueron insuficientes para establecer conclusiones sobre esta alternativa, por lo que es necesario seguir analizando sus beneficios.
Mientras tanto, las piscinas recomiendan ducharse antes de entrar en el agua para eliminar cualquier rastro de sudor y, por supuesto, no orinar en su interior; aunque no siempre se pone el foco en los importantes riesgos que conlleva no seguir estas normas.
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