EL CORAZÓN SE RESIENTE A LARGO PLAZO
Los niños supervivientes al cáncer tienen mayor riesgo de infarto cuando sean adultos
Los científicos destacan la necesidad de adoptar hábitos de vida y dieta saludables, ejercicio y análisis periódicos en la edad adulta, para evitar el desarrollo de enfermedades cardiovasculares después de superar un tumor.
Publicidad
Cada año son diagnosticados en España 1.400 nuevos casos de cáncer infantil, que a pesar de ser una enfermedad poco frecuente es la primera causa de muerte por enfermedad hasta los 14 años. ¿Qué sucede con la salud de los menores que sobreviven al cáncer?
Al parecer, cuando se supera esta enfermedad en la etapa infantil, durante los años siguientes, los controles médicos se preocupan más por evitar que se reproduzca el tumor que por controlar otras dolencias. Y esto implica que pasen desapercibidas o incluso infradiagnosticadas otras enfermedades graves en la etapa adulta.
Por ejemplo, según un reciente estudio publicado por el European Heart Journal, aunque los avances científicos han conseguido aumentar la supervivencia de los menores con cáncer, lo que no han podido evitar es el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Es decir, los niños que sobreviven a un tumor tienen más riesgo de infarto y de muerte prematura.
La investigación analizó una muestra de 951 jóvenes alemanes supervivientes de cáncer, que fueron monitorizados entre 2013 y 2016. “Nuestros resultados muestran que estos supervivientes de cáncer infantil tienen un riesgo elevado de sufrir enfermedades cardiovasculares”, explica el profesor Joerg Faber, co-director del estudio.
“Por lo general, los supervivientes se someten a revisiones durante los cinco o diez años siguientes a la finalización de la terapia. Y esto se centra en el peligro de que el cáncer regrese o los efectos secundarios del tratamiento, no en otros problemas”.
Mortalidad prematura
¿A qué se debe este elevado riesgo de la incidencia de enfermedades del corazón y mortalidad prematura? Los científicos alemanes advirtieron que aquellos adultos que fueron niños supervivientes al cáncer tenían un patrón común: elevada presión arterial y trastornos lipídicos como la “dislipidemia”, que es una elevada concentración de grasa (colesterol y triglicéridos) en sangre.
No es la primera vez que se señala el paso por el cáncer infantil como un factor de riesgo de enfermedades en la edad adulta. Precisamente el año pasado, The Lancet publicaba otra investigación donde se reflejaba esta vulnerabilidad de los niños supervivientes, que tienen el doble de probabilidades de sufrir problemas de salud crónicos que el resto de la población.
Con una muestra de 5.225 adultos de Estados Unidos, esta investigación obtuvo conclusiones preocupantes: a los 50 años, quienes habían superado un tumor en su infancia tenían 17,1 enfermedades crónicas (frente a 9,2 en la población general), de las que 4,7 eran graves o discapacitantes (frente al 2,3 de media habitual).
Los científicos advertían en este trabajo que los supervivientes de un cáncer infantil se convertirán en una población vulnerable a medio y largo plazo. ¿Cómo evitar estos riesgos? Según los investigadores, una alimentación y hábitos de vida saludables, ejercicio frecuente y análisis periódicos son la mejor medicina para evitar problemas de salud a medio y largo plazo en los supervivientes del cáncer.
Publicidad