Por qué la pantalla facial no protege contra la COVID-19

En mayo se declaró la obligación del uso de mascarilla a causa de la crisis sanitaria ocasionada por la COVID- 19. Desde ese momento, existe mucha variedad a la hora de elegir cómo protegernos. Desde las mascarillas quirúrgicas, FPP2, de tela o las pantallas, todas ellas aportan protección para poder frenar esta pandemia. Aun así, ¿nos ofrecen la misma eficacia?

Un estudio realizado por la Facultad de Ingeniería y Ciencias de la Computación de la Florida Atlantic University ha querido comprobar la eficiencia de las pantallas faciales. Para realizar la investigación, utilizaron un maniquí y una lámina de luz láser, junto a una mezcla de agua destilada para simular la tos. De esta manera, pudieron visualizar las gotas expulsadas de la boca. Así, observando el trazo que realizan las gotas, comprobaron que la pantalla no obstaculiza ni frena su paso.

Las pruebas manifiestan que estos protectores no son del todo fiables, ya que las gotas respiratorias se pueden mover con relativa facilidad por el visor. De esta manera, se extienden sobre el ambiente, llegando a la cara a través de los espacios de la pantalla.

Se tiene la falsa creencia de que las pantallas faciales ofrecen la misma protección que las mascarillas quirúrgicas. Sin embargo, las partículas más pequeñas, a causa de su tamaño, tienen a seguir los patrones de flujo del aire, por lo que no se quedan paralizadas en la pantalla protectora.

Además, esta forma de protección no cuenta con un cierre similar al de las mascarillas, ya que los laterales y la parte de abajo son accesos para las partículas del ambiente. Por ello, según el estudio, para minimizar la propagación de la Covid-19, es preferible el uso de mascarillas quirúrgicas o de tela, en vez de protectores faciales.

En una de las pruebas realizas en el estudio, en una exposición de un minuto a media hora, la pantalla solo fue efectiva en un 23%, por lo que no redujo la inhalación de partículas del ambiente. Por este motivo, se recomienda el uso de pantallas protectoras únicamente como complemento a la mascarilla quirúrgica.

Las conclusiones de varios estudios confirman que el mejor método para protegernos de la Covid-19 es el uso de mascarillas en todas sus variantes. Tanto las mascarillas quirúrgicas como las de tela actúan como escudo antes las partículas del aire.

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