Problema de salud pública: el tabaco reaparece en Hollywood

Hubo una época en la que las grandes estrellas de Hollywood aparecían fumando en todas las películas y en la que los cigarrillos eran un símbolo de distinción. Sin embargo, décadas más tarde y tras varios millones de muertos, el tabaco vio enormemente reducida su presencia en los grandes estrenos de la meca del cine. Una tendencia que parece que está revirtiendo.

Así lo asegura un reciente informe publicado por el Centro de Control de Enfermedades de EEUU (CDC, por sus siglas en inglés), que, tras analizar la presencia de tabaco en las películas estrenadas entre 2010 y 2016, ha concluido que ésta ha aumentado un 72%, algo que la institución considera “preocupante”.

El informe indica que “a pesar de que hubo menos películas que mostraban el consumo de tabaco en 2016 en comparación con 2010, se produjo un aumento en la exposición total”. Es decir, que hay menos películas que muestran tabaco, pero las que lo hacen le dedican más tiempo.

El aumento de escenas con tabaco fue mayor entre las películas calificadas para mayores de edad, en las que las imágenes de consumo de tabaco aumentaron un 90%, pero los investigadores señalaron con especial preocupación la situación de las películas destinadas el público más joven.

Según el informe, entre los años 2005 y 2010 el consumo de tabaco en películas clasificadas como aptas para público infantil (categorías G y PG) fueron disminuyendo, hasta el punto de que hoy en día es raro ver el tabaco en una película de este tipo. Sin embargo, destacan el aumento de un 43% que se ha producido en los últimos años en las películas de la categoría PG-13 (no recomendadas a menores de 13 años).

Para el CDC este dato “es particularmente preocupante debido a la relación causal establecida entre la exposición de los jóvenes al tabaquismo en las películas y la iniciación del tabaquismo”. Los investigadores recuerdan que “cuanto más jóvenes sean los que se exponen al tabaco, más probable es que comiencen a fumar” y que los que ven películas de este tipo tienen “aproximadamente dos o tres veces más probabilidades de comenzar a fumar”.

Por este motivo desde el CDC recomiendan a los estudios de cine que reduzcan los incidentes relacionados con el tabaco que aparecen en películas orientadas al público más joven y que clasifiquen aquellas películas en las que aparece el tabaco como no aptas para menores, lo que “ayudaría a prevenir o retrasar el inicio del consumo de tabaco entre los jóvenes”.

Aún así, desde el CDC aseguran que, a pesar del aumento en las representaciones del uso del tabaco en las películas, el tabaquismo entre los adolescentes continúa disminuyendo gracias a los “sólidos esfuerzos de salud pública”. Aunque también señalan que con las tendencias actuales se estima que 5.6 millones de jóvenes que viven hoy morirán por enfermedades relacionadas con el tabaco.