DÍA INTERNACIONAL DE LA MUJER
La igualdad de género alarga la vida según la ciencia
A medida que disminuye la brecha entre ambos, la esperanza de vida aumenta.
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El 8 de marzo se celebra el Día Internacional de la Mujer, una jornada que busca reivindicar la lucha de las mujeres por la igualdad y el reconocimiento de sus derechos. Aunque se ha evolucionado en este sentido, queda mucho camino por recorrer y una de las herramientas más poderosas a la hora de mostrar y demostrar el impacto de la igualdad de género en toda la sociedad, es su influencia en nuestra salud. Esta semana se ha publicado en 'Plos Global Public Health' el primer estudio global que ha investigado cómo la igualdad de género puede estar asociada con la esperanza de vida.
De acuerdo con el el último informedel Foro Económico Mundial sobre Igualdad de Género, eventos globales como el aumento del coste de vida, la pandemia de COVID-19, la emergencia climática y los conflictos y desplazamientos a gran escala, están frenando el progreso hacia la paridad de género. Esto, a su vez, puede poner en peligro el desarrollo socioeconómico y la mejora de las condiciones de vida y de trabajo, frenando los avances en la esperanza de vida que se han producido en las últimas décadas.
Para investigar si la igualdad de género estaba asociada con la esperanza de vida para mujeres y hombres y evaluar la brecha de género en la esperanza de vida en todo el mundo, un equipo liderado por Catarina Pinho-Gomes, del Instituto George para la Salud Global utilizó un índice global de brecha de género, basado en el índice desarrollado por World Foro Económico (WEF), y lo aplicó en 156 países entre 2010 y 2021.
El Índice Global de Brecha de Género del WEF compara el estado actual y la evolución de la paridad de género en cuatro dimensiones clave (Oportunidad y Participación Económica, Logro Educativo, Salud y Supervivencia, y Empoderamiento Político). Para el estudio liderado por Pinho-Gomes, la dimensión salud fue excluida porque incluye la esperanza de vida saludable, que fue objeto de este estudio.
Los resultados señalan que si bien las variaciones socioeconómicas entre los países analizados y la proximidad geográfica sugieren que la igualdad al principio beneficia principalmente la vida y la salud de las mujeres, el progreso en este ámbito también ayuda a los hombres a vivir más y mejor.
"Muchos de los factores que determinan cuánto tiempo vivirá, como las condiciones de trabajo y de vida, la exposición a la contaminación, el acceso a la atención médica, la educación, los ingresos y el apoyo social, se combinan con las diferencias de género en todo el mundo – explica Pinho-Gomes en un comunicado–. A medida que los países avanzan más hacia la igualdad de género y las mujeres tienen la oportunidad de participar más plenamente en la vida política, económica y social, toda la sociedad cosecha las recompensas".
Entre las tres dimensiones incluidas en este estudio (es decir, política, económica y educativa), la igualdad de género en la educación demostró ser el vínculo más fuerte con el incremento de la esperanza de vida, tanto para mujeres como para hombres.
"Esto sugiere que invertir en educación es primordial, particularmente en países de ingresos bajos y medianos, donde a muchas niñas todavía se les niega el acceso a la educación y los recursos son limitados – añade Pinho-Gomes –. Incluso en los países de altos ingresos, donde se han logrado avances sustanciales para abordar las desigualdades de género en los últimos años, invertir en la igualdad de género aún puede beneficiar la esperanza de vida, particularmente para los hombres. Este estudio confirmó lo que ya habíamos visto para los países de la UE utilizando uníndice diferente, reforzando la validez de nuestros hallazgos. La asociación más débil entre la igualdad de género en el dominio político y la brecha de género en la esperanza de vida plantea preocupaciones sobre cómo los sistemas políticos están implementando la igualdad de género en todo el mundo".
En general, en 2021, cada 10 % de reducción en la brecha de género se asoció con un aumento de 4,3 meses en la esperanza de vida de las mujeres y de 3,5 meses para los hombres. Eso sí, en el estudio se destaca que hay una variación considerable entre zonas geográficas y que la implementación de políticas de igualdad por parte de los gobiernos es fundamental ya que "la evidencia demuestra que mejorar la representación de las mujeres en múltiples sectores contribuye a sociedades más ricas y, por lo tanto, más saludables para todos", concluye Pinho-Gomes.
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