Las nuevas mascarillas fabricadas por el CSIC y la empresa Bioinicia ya están a la venta

Acaban de salir a la venta. Las nuevas mascarillas fabricadas con nanofibra por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) pueden ser ya adquiridas esta semana.

Han tardado algo más de lo esperado, pero el primer lote de medio millón de las nuevas mascarillas FFP2 del CSIC ya ha llegado al mercado. Este nuevo modelo ha sido fabricado con un tejido especial desarrollado por el equipo del investigador José María Lagarón, del Instituto de Agroquímica y Técnica Alimentaria (IATA-CSIC), en colaboración con la empresa base del CSIC, Bioinicia S.L. Este nuevo material es aplicable no solo a la modalidad FFP2, sino también la FFP1, la FFP3 y a las mascarillas quirúrgicas.

Ahora mismo solo pueden adquirirse en España a través de la plataforma de OpenMarkt o solicitándolas directamente a la dirección de correo de la empresa Bioinicia (proveil@bioinicia.com). No obstante, se prevé que a lo largo de los próximos días se comercialicen también en Alemania y Latinoamérica. Tienen un precio inferior a 3 euros y pueden comprarse en packs de 10, 25, 50, 100, 250 y 500 unidades.

¿Qué ventajas tienen frente a otras?

Las nuevas mascarillas se caracterizan por ser más finas que las habituales y, a pesar de ello, ofrecer una protección superior. Esto se debe al uso de un nuevo tejido de material de nanofibras que tiene propiedades de filtración mecánica, lo que las hace, además, más resistentes y, por tanto más duraderas. De hecho, el CSIC afirma que podrán reutilizarse durante varios días sin que pierdan eficacia.

Como explicaba en un comunicado el principal investigador del equipo que ha desarrollado estas mascarillas, Jose María Lagarón: “Estas mascarillas están hechas de nanofibras, que aportan una filtración mecánica, al contrario que el material tradicional Meltblown Polipropileno, hecho principalmente en China, que aporta una filtración electrostática. La filtración mecánica con nanofibras está reportada como más eficiente para parar aerosoles pequeños, ya que tienen un tamaño de poro inherentemente más pequeño. Nuestro diámetro de fibra es del orden de 60 veces más fino que la fibra tradicional. Además, se ha reportado que disipan mejor la humedad y el calor.”.

Estas mascarillas cuentan con el certificado especial CPA FFP2, que Europa ha lanzado para lograr mitigar el problema derivado de la interrupción del comercio de ciertos materiales de filtración que provenían principalmente de China. Han sido certificadas por DEKRA y APPLUS+.

Se espera que en septiembre lleguen al mercado modelos de filtros antimicrobianos y otros biodegradables elaborados por la misma empresa. A partir de ese momento todas las mascarillas fabricadas con el filtro de Bioincia S.L, denominado PROVEIL, serán también antimicrobianas.

La estimación del CSIC es que, a partir de octubre de este año se puedan fabricar unos 11 millones de mascarillas como esta por semana. No obstante, como han señalado, esta iniciativa “no pretende competir a medio y largo plazo con los fabricantes de mascarillas ya existentes sino crear una red de fabricantes de calidad a los que servir el filtro o las máquinas industriales para hacerlo”.

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