Nace en India un bebé con dos cabezas, tres brazos y dos corazones

Shaheen Khan y su esposo Sohail esperaban gemelos, tal y como les habían indicado los médicos a partir de las ecografías practicadas. Sin embargo, cuando Shaheen dio a luz no nacieron dos bebés: nació una sola criatura con dos cabezas, tres brazos y dos corazones.

Los bebés siameses nacieron el pasado 28 de marzo en Ratlam, en el estado indio de Madhya Pradesh. Cuando los médicos los vieron, se detectó un caso de parapagus dicefálico o hermanamiento facial. En las fotos tomadas se puede apreciar como los dos bebés están unidos por el torso y, aunque cada uno tiene su cabeza y su corazón, comparten el cuerpo.

Además, el tercer brazo de ambosse sitúa entre las dos cabezas. Cuando nacieron los bebés, estos fueron trasladados para mantenerlos bajo observación médica en otro hospital distinto al de su madre, en Indore, tal y como relatan en 'India Times'.

Qué es el parapagus dicefálico

Esta condición se da en bebés que están unidos por su torso pero cada uno con su propia cabeza. Este hermanamiento parcial a veces resulta en un mortinato; es decir, que la criatura nace muerta. Sin embargo, en el caso de los siameses de India, los hermanos se encuentran en observación médica.

El doctor Naved Qureshi, del hospital donde se encuentran los niños, admitió a India Times que la condición de los niños es "crítica". Además, el doctor subrayó que, en casos de hermanamiento parcial, muchos niños mueren dentro del útero o a las 48 horas de su nacimiento.

En el caso de los siameses Khan, aún no se ha planteado ninguna cirugía y, aunque en el 60 ó 70 % de los casos los niños no superan la operación, si estos cuentan con dos corazones, uno de cada uno, sus posibilidades de supervivencia mejoran.

Hasta la fecha se conocía que los siameses continuaban en observación. Sin embargo, no ha trascendido ningún detalle más acerca de su estado de salud.

SEGURO QUE TE INTERESA:

Muere un hombre al ingerir por error la cafeína equivalente a 200 cafés

Las microsiestas de tan sólo unos segundos ocurren y no te das ni cuenta: ¿Son buenas o malas?