EN 159 AÑOS
La NASA y el Vaticano se unen para estudiar un asteroide que podría impactar en la Tierra
Bennu, uno de los asteroides más peligrosos que existen, podría tener como destino final la Tierra.
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Bennu, el asteroide que pesa 78.000 millones de kilos y mide 500 metros, es uno de los más peligrosos que existen. ¿El problema? que puede que su destino final sea la Tierra e impacte contra ella el 24 de septiembre de 2182, es decir, en 159 años.
A pesar de que las probabilidades son bajas (una entre 2.700), la NASA ha decidido unirse a los astrónomos del Vaticano para estudiar esta gigantesca roca que viaja a 100.000 kilómetros por hora.
Para ello, la Agencia Espacial estadounidense ha tomado muestras de Bennu con la sonda OSIRIS-REx, que llegarán en tan solo cuatro días, y serán analizadas por expertos de ambas instituciones.
Será el hermano Robert J. Macke, astrónomo del Vaticano y experto en meteoritos, el que se encargue de analizar las rocas sustraídas de Bennu, ya que parecen estar compuestas por extraños materiales. La nave espacial no tripulada OSIRIS-REx se lanzó en 2016 y será en los próximos días cuando regrese con las piedras obtenidas, lo equivalente a una taza.
¿Por qué la NASA ha pedido ayuda al Vaticano?
De primeras, puede parecer un poco extraño que la NASA pida ayuda a la iglesia para estudiar un asteroide. Para entender por qué, hay que saber primero que, aunque pocos lo saben, la Iglesia Católica Romana cuenta con un eminente observatorio dirigido por astrónomos jesuitas desde la década de 1930 y son hombres católicos devotos los que estudian el cosmos.
Macke es quien ha inventado y construido la máquina que va a medir las muestras del asteroide. Según la NASA, ha pedido no cobrar ni un solo euro en esta misión porque lo hace por vocación.
La idea final es tener hallazgos que hagan entender más sobre cómo están formados los asteroides en el espacio y de qué.
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