La nueva teoría que explicaría cómo se construyó la pirámide más antigua de Egipto

Egipto se trata de un país fascinante y que a día de hoy aún sigue sorprendiendo por sus edificaciones construidas hace miles de años. Esta tierra es fuente de numerosas investigaciones que intentan aportar algo de luz a cómo se crearon todas esas construcciones y cómo era la vida en la antigüedad. Hace unos días conocimos el posible motivo de la distribución de las pirámides de Guiza, y hoy te contamos otro relevante descubrimiento sobre otra pirámide.

Esta vez te hablamos de la pirámide escalonada de Zoser, considerada la más antigua de Egipto y que sirvió como prototipo a las pirámides de Guiza. Esta se encuentra en la necrópolis de Saqqara, al sur de la ciudad de Menfis y a 17 kilómetros al sur de las tres pirámides de Egipto.

Se construyó como tumba para el primer o segundo faraón de la tercera dinastía de Egipto durante el periodo del Reino Antiguo, hace alrededor de 4.700 años. Está formada por 6 niveles y tiene 62 metros. Sin embargo, hasta ahora muy poca información se ha podido obtener sobre su construcción.

Un estudio ha demostrado que esta podría haber sido construida con un equipo de alta tecnología. Se cree que se podría haber utilizado un sofisticado ascensor hidráulico en su núcleo durante la construcción, con el que poder elevar las enormes piedras utilizadas. Si se confirmase estas investigaciones, se trataría de un sistema de ingeniería realmente avanzado para esa época.

Por su parte, el estudio también ha explicado que un recinto próximo se podría haber utilizado como una especie de dique de contención, diseñado para capturar el agua y los sedimentos de los alrededores.

Además, una serie de pozos de 400 metros de largo y 27 metros de profundidad fuera de la pirámide podrían haber servido como instalaciones de tratamiento de agua. De esta manera, cuando el agua iba pasando por cada uno de ellos, los sedimentos se separaban, proporcionando agua más limpia para su uso en el proceso de construcción.

Después, el agua llegaba hasta unos pozos situados en el interior de la pirámide, sobre los que se cree que se utilizaban un sistema de flotadores. Cuando el agua de dentro de estos pozos subía, se elevaban esos flotadores, sobre los que se situaban las piedras y materiales que querían transportar y, por tanto, estos también se levantaban. Finalmente, el pozo se vaciaba mediante un sistema de tapones en su base.

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