Por qué vamos más al baño después de consumir alcohol

Tomarse una copa en algún momento puede ser algo común, especialmente en ocasiones especiales y la sensación de ir más al baño tras su ingesta también se produce. Esto sucede por una relación de causa-efecto y no se debe a la creencia de que se llene la vejiga, y es el propio alcohol es el motivo porque acudimos mucho más al baño

Cuando consumimos bebidas alcohólicas se producen una serie de cambios en nuestro organismo, muchos de ellos se producen a nivel cerebral. Cuando ingerimos el alcohol se inhibe la hormona vasopresina, que está directamente relacionada con la actividad producida en nuestros riñones. En condiciones normales de actuación del propio cuerpo, esta hormona regula la cantidad de agua que se absorbe y expulsa a través de la orina. Cuando utilizamos un inhibidor como es el alcohol, los riñones se disponen a expulsar más agua de la necesaria.

Realmente estos efectos los solemos notar al día siguiente. junto a la temida resaca se produce algo de deshidratación en nuestro organismo. Además, si la bebida ingerida es cerveza, los efectos de la deshidratación serán mucho más acentuados, esto se debe especialmente a que este producto es diurético, ya que contiene gran porcentaje de lúpulo. Debido a ello y aunque el alcohol no inhibiera la vasopresina, seguiríamos teniendo ganas de ir al baño. Una vez eliminemos toda la cantidad de alcohol restante de nuestro organismo, se volverá a producir esta hormona, y por lo tanto la formulación y el exceso de agua se corrigiera a los niveles normales.

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