Rizartrosis o cómo escribir mucho en el móvil nos acaba costando la salud

El teléfono móvil es una herramienta que se ha convertido en indispensable para nuestro día a día. Lo llevamos siempre encima y cada vez nos pasamos más tiempo pegados a su pantalla. Es un modo de estar conectados permanentemente con la realidad al tiempo que mandamos mensajes a nuestros contactos en cuestión de décimas de segundo.

Sin embargo, el uso abusivo del teléfono puede causar problemas a corto y largo plazo además de lesiones degenerativas como la rizartrosis, que es la artrosis del pulgar.

Qué es la rizartrosis

Esta lesión, es una forma de artrosis que afecta al dedo pulgar de la mano, y que aparece por el agarre incorrecto y prolongado del teléfono móvil. Se da una inflamación crónica por el desgaste y el envejecimiento del cartílago de esa parte del cuerpo. El dolor puede ir desde el pulgar hasta incluso el antebrazo de este problema del que ahora se ven más casos que nunca a causa del móvil.

Pero como tantas otras cosas, se puede corregir y evitar este inconveniente gracias a una buena postura al usar el smartphone tanto de las manos como el brazo. Para estar haciendo un buen uso del móvil sin desgastar las articulaciones, la muñeca y el pulgar deben estar alineados en línea recta con el antebrazo.

Si se da el caso contrario donde las articulaciones se encuentran demasiado flexionadas y en tensión, lo más probable será que los dedos se desgasten antes con sus posteriores consecuencias para la salud.

Por último, los fisioterapeutas también recomiendan que, al usar el pulgar para manejar nuestro teléfono móvil, lo tengamos en una posición recta en el medio de la pantalla. De esta manera serás capaz de llegar a cualquier zona de la pantalla sin estirar el dedo demasiado y así no lo forzarás pudiendo provocar la rizartrosis.

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