Según la ciencia, esto es lo que deberías hacer para descansar

Cuando hablamos de descanso lo primero que se nos viene a la cabeza para lograrlo es dormir. Hoy en día, encontrar el descanso en la sociedad actual es cada vez más complicado y es por ello que asociamos el término descansar al de dormir ya que nos falta tiempo para pasarlo en la cama, pero estábamos equivocados. Te contamos los detalles.

Un grupo de investigadores de Hubbub se propusieron desarrollar la mayor encuesta de la historia relacionada con el descanso. Para ello, diseñaron un formulario que tardaba en cumplimentarse entre 30 y 40 minutos con el propósito de averiguar cómo entendía cada persona este concepto. En total, consiguieron una muestra superior a las 18.000 personas.

Cuando se le preguntó a los sujetos de estudio qué significaba el descanso para ellos, la palabra que citaron un mayor número de veces fue relajación. Las siguientes fueron paz, calma, comodidad y, en último lugar, sueño.

Tras esta pregunta, el estudio daba a elegir un total de 25 actividades con el propósito de que los encuestados indicaran cuál de ellas asociaban más al descanso. Una vez más, dormir no fue la primera opción. La mayoría de las respuestas elegidas en mayor porcentaje tenían que ver con escapar de la rutina, el entorno profesional y el personal.

Diferencias entre mujeres y hombres

En esta encuesta, las mujeres vinculan más la lectura a la relajación, mientras que los hombres se relajan más escuchando música. Sin embargo, ambos sexos no consideran la práctica de ejercicio como algo opuesto al descanso.

Actividades físicas como correr suman al cerebro en un estado muy parecido al de la meditación y, además, ayudan a liberar el estrés y a deshacernos de la ansiedad.

La encuesta finalizaba con varias escalas destinadas a medir el bienestar. La inmensa mayoría de los que afirmaron sentirse mejor declaraban también que habían gozado de un buen descanso en las últimas 24 horas, mientras que aquellos que estaban cansados indicaron estar más infelices.

Algo que llamó mucho la atención, tal y como explicó el investigador Jonathan Gershuny, es que hay quien considera que estar ocupados se ha convertido en una insignia de honor. Algo totalmente contrario a lo que ha sucedido en los siglos anteriores, cuando el tiempo libre disponible era el mayor símbolo de estatus social que se podía conseguir.

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