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¿Merece la pena comprar una TV que no sea Smart TV?
Comprar una televisor nuevo y convertirlo en inteligente es una alternativa real a la compra de una Smart TV.
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En el proceso de compra de cualquier dispositivo entran en juego muchos factores, como puede ser el uso que vayamos a hacer de ellos, el tamaño y sobre todo el precio. Un debate que siempre surge es debemos invertir un dispositivo de última generación o comprar algo más barato que podamos adaptar. Te ayudamos a resolver este dilema.
Ventajas de comprar un televisor no inteligente
A la pregunta ¿es rentable comprar un televisor que nos sea Smart TV?, la respuesta es sí, sobre todo en aquellos modelos que no tienen un tamaño standard y que podemos encontrar a buen precio. La diferencia de estos con una Smart TV del mismo tamaño puede variar considerablemente. Un margen lo bastantemente grande como para pensárnoslo, porque podemos hacerlo sin renunciar a nada.
Una opción muy recomendable es adquirir un televisor a muy buen precio y convertirlo en inteligente con la ayuda de un Fire Stick o Android TV, por un pequeño desembolso de dinero tenemos la oportunidad de disfrutar de un software moderno y actualizado. Y la diferencia de compra con una Smart TV nos permite con el paso del tiempo renovarlo y tenerlo siempre actualizado.
Mientras que para conseguir una Smart TV a buen precio supone renunciar a los modelos más recientes, por lo que con el paso del tiempo su software queda obsoleto, notamos que no es tan rápido y ágil como antes y al carecer de actualizaciones no mejorará el problema. Por lo que podemos plantearnos en ese momento hacernos del mismo modo con un dispositivo adicional cómo de los que hablábamos antes.
De ahí que antes de lanzarnos a la compra compulsiva de una Smart TV debemos explorar las opciones y valorar esta posibilidad, que nos abre muchas más posibilidades. De este modo por el mismo precio de una Smart TV de un tamaño determinado, podemos optar por un televisor de un mayor tamaño que a su vez podemos transformar en inteligente fácilmente y con una pequeña inversión. Mientras que un televisor de 32" que no es Smart se puede encontrar por unos 120€ con buenas ofertas, el mismo tamaño siendo Smart TV lo normal es que se mueva entre los 180€ o 200€.
Son muchas las ventajas que ofrece la compra de dispositivos como Android TV y Fire Stick TV son muy fáciles de instalar, ya que podemos enchufarlos a cualquier dispositivo con HDMI o en su defecto utilizar un adaptador. Su interfaz es la misma ya que se basan en sistema Android y disponen de las mismas opciones que una Smart TV con el mismo sistema. Instalación de Apps, juegos y skills con las que sacar el máximo rendimiento.
Otra ventaja es que podemos llevárnoslo e instalarlo en cualesquiera dispositivos convirtiéndolo de forma automática en inteligente. Llegado el momento podemos sustituirlo fácilmente por un modelo más moderno sin remordimientos, ya que no tratarse de una inversión muy alta podemos permitírnoslo. Algo sin duda a tener en cuenta para los amantes de las gangas y que nos les gusta pagar más por lo mismo. El único inconveniente, si el televisor no tiene HDMI CEC, necesitaremos dos mandos a distancia, pero esto es un pequeño precio a pagar para disfrutar de todas las ventajas de una Smart TV al mejor precio.
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