UN INQUIETANTE PROYECTO

Modifican las Ray-Ban de Meta para identificar a cualquier persona en tiempo real

Las gafas de Meta han servido de conejillo de indias para probar una tecnología que es capaz de analizar el rostro de las personas que nos cruzamos en busca de datos personales.

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Las gafas inteligentes de Meta, fabricadas por Ray-Ban, se han convertido poco a poco, y sin hacer ruido, en todo un éxito. Desde luego ya son un referente de gafas inteligentes, y una opción infinitamente más elegida que las Vision Pro de Apple, algo que se entiende porque las de Meta cuestan diez veces menos que las de Apple, pero por otras muchas cosas también. Unas gafas que no muestran todo su verdadero potencial al consumidor, ya que hay quienes le sacan todo el partido con importantes modificaciones de su código, y con resultados sorprendentes, como el que vamos a ver.

Un proyecto sorprendente, y algo perverso

Los creadores de este curioso proyecto han sido dos estudiantes de la Universidad de Harvard, que han puesto de relieve el potencial de estas gafas, aunque de una forma que entendemos es algo perversa, y que no debería salir adelante, algo que afortunadamente los propios estudiantes tienen claro. Se trata de un proyecto que demuestra que, con las manipulaciones oportunas, las gafas de Meta pueden utilizar el reconocimiento facial para fines cuando menos poco éticos.

No es que hayan usado por algo concreto las gafas de Meta, sino para demostrar que con un producto tan común como este, se pueden obtener resultados inquietantes sin mucho esfuerzo, y si la persona que busca obtener información de terceros tiene algunos conocimientos. Esta tecnología se denomina I-XRAY, y funciona de una manera bastante sencilla, pero extremadamente práctica.

Lo que hace esta tecnología es usar la función de transmisión de vídeos en tiempo real desde las gafas en Instagram. Lo que han hecho después es un software que desde un PC analiza la transmisión en tiempo real, para buscar información en la red de todas las personas que identifica el reconocimiento facial. La demostración muestra cómo prácticamente en tiempo real obtienen información de esas personas que se encuentra disponible en la red.

Hasta el punto de entablar conversaciones con personas a las que no conocen, pero aportando datos que les ha facilitado el reconocimiento facial de su transmisión. Consiguieron identificar a todos los compañeros de clase y personas completamente desconocidas, por lo que los efectos de esto sin duda pueden ser muy perversos. Y aquí es donde viene la explicación y lógica detrás del proyecto creado por estos estudiantes.

Y es que su motivación no es la de llevar este software al mercado para que cualquiera pueda saber detalles de la vida personal de todas las personas que se encuentra por la calle. Sino para todo lo contrario, alertar de los peligros que hay detrás de esta facilidad para poder identificar rostros en la vida real, y también en la red. Y sobre todo quieren demostrar que las conspiranoias sobre reconocimiento facial y no son algo de distopias, sino que lamentablemente ya existen y están entre nosotros.

De alguna manera vienen a demostrarnos que, si esto es posible con unas gafas de 300 euros que se venden masivamente en el mercado, qué no podrán hacer corporaciones y gobiernos con tecnología mucho más sofisticada. Sin duda es algo que da que pensar.

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