El resurgir de la tecnología vintage: consolas, vinilos… y ahora los cassettes

La nostalgia vende y mucho. En decoración, lo vintage se ha convertido en un estilo adorado masivamente y adaptado por las grandes cadenas para responder a la demanda de los consumidores. Y la tecnología tampoco escapa a esta tendencia de reverenciar lo antiguo.

El ejemplo más común son los vinilos, que han devenido en un objeto de coleccionista. Se compran por fetichismo blando, para regalar, o sencillamente por el gusto de escuchar las melodías tañidas de ese chisporroteo de chimenea que aparece a base de girar en el plato durante años.

Las décadas de los '80 y de los '90 fueron de decadencia para este formato, ya que los compact disc se lo comieron todo. Incluso al cassette, que llegó a tener su momento de gloria en los '90, pero el ascenso de los CDs fue tan vertiginoso que a las cintas les duró poco la fama. Sin embargo, a partir de mediados del año 2000 hubo un tímido repunte en ventas de los vinilos... y sólo era el principio.

Las cifras varían dependiendo de si las estima la IFPI (Federación Internacional de la Industria Fonográfica), la RIAA (Recording Industry Association of America) u otra organización del sector, pero el crecimiento en ventas es indiscutible. En Wikipedia existe incluso una página dedicada al “resurgimiento del vinilo”, donde se indica que en 2007 se vendieron discos por valor de 55 millones de dólares. En 2011 las ventas ya eran 116 millones de dólares (en un contexto en el que los CDs no se vendían precisamente bien). En 2015 el volumen de negocio ya era de 416 millones de dólares.

Uno de los últimos datos indicativos de la tendencia lo ha publicado la asociación de música británica British Phonographic Industry (BPI). En un informe que repasa el mercado musical, la organización apunta que en Reino Unido las ventas de vinilos aumentaron un 26,8% durante 2017.

Lo sorprendente es que los cassettes también amagan una segunda juventud. El pasado año, en Estados Unidos (donde cuando pasa algo suele tener réplica en muchos países) fue el mejor año para los cassettes desde 2012. Según la auditora Nielsen, se vendieron 174.000 copias en formato cinta, un incremento del 35% respecto al 2016.

Pero es que en 2016, el incremento respecto al año anterior había sido del 74%. El motivo del auge de la popularidad de las cintas hay que buscarlo en el cine y las series. De hecho, los tres álbumes más vendidos en este formato son distintas versiones de la banda sonora del film 'Los guadianes de la galaxia', cuya segunda entrega se estrenó en 2017. El cuarto en el ranking es la banda sonora de la serie 'Stranger Things'.

Pero no toda la nostalgia es musical, porque también con las consolas retro el fenómeno ha sido masivo. Dos de las míticas de los años '90, la NES y la Mega Drive, se relanzaron en formato compacto. ¿El resultado? Al poco tiempo de que la empresa Argos pusiera en venta la nueva Sega Mega Drive con 80 juegos instalados el interés por el dispositivo se disparó.

De hecho, en sus primeras Navidades las ventas crecieron un 400%. Respecto a la NES Classic, Nintendo anunció en abril del pasado año que había vendido 2,3 millones de unidades de su dispositivo relanzado. No todo va a ser la Nintendo Switch...