Evita perder tus cuentas en redes sociales guardando tus códigos de respaldo

A día de hoy para casi cualquier cosa es necesario el uso de la tecnología. Es de lo más habitual tener cuentas de usuario y contraseñas para acceder a cualquier servicio. Ya sea el banco, el médico, el gimnasio o el correo electrónico. Además de todos estos datos, debemos disponer de código de recuperación por si existe algún problema o la cosa falla. Demasiados datos necesarios para evitar problemas. A continuación, te damos las claves para tenerlos siempre a mano y a buen recaudo.

Guarda tus códigos de recuperación

Cada cuenta de usuario, cada contraseña o código de recuperación son de vital importancia hoy en día. La digitalización ha llegado a casi todos los lugares y servicios. Desde ver las cuentas del banco o nuestra serie preferida. Para mantener la seguridad de las mismas además de las contraseñas son indispensables los códigos de verificación, algo que no puede estar a la vista de todo el mundo y que debemos no solo tener a mano sino fuera del alcance de cualquiera. Por lo que es importante usar cualquiera de estos métodos para almacenarlas.

Del único sitio que es casi imposible sacar una información a no ser que sea bajo coacción es de la mente humana. En nuestra cabeza almacenamos millones de datos a los que nadie más que nosotros mismos tiene acceso, e incluso a veces ni nosotros mismos somos capaces de acceder a ella. Uno de los mejores sitios, sobre todo para algunos usuarios, para guardar sus códigos es su propia memoria. Aunque puede tener cierto grado de dificultar aprendernos series de número y letras aleatorios, estos suelen tener una gran longitud y son algo que no solemos usar con frecuencia, por eso corremos el peligro de olvidarlos fácilmente.

Por lo que en algunos casos es mejor hacer uso de otro tipo de memorias Flash USB. Siempre que tengamos acceso a un puerto USB podremos acceder a los códigos de recuperación. Al no disponer de acceso a Internet están a salvo de los robos de datos. Aunque estás son susceptibles de pérdida o de daños externos como los producidos por líquidos. Podemos hacer uso de dispositivos que disponen de protección adicional ya que incorporan la posibilidad de contraseña.

Para aquellos usuarios que prefieren una solución analógica, tenemos la opción de transcribir estos a una agenda o libreta. Pero al igual que el caso anterior son más propensos al deterioro y los daños físicos, al igual que la pérdida o el robo. En nuestras notas podemos incluir nuestros propios códigos de encriptado con los que solo nosotros podremos descifrar los códigos. Como por ejemplo hacer referencias a datos que únicamente conocemos nosotros.

También podemos hacer uso de app que utilizan el cifrado de contraseñas para protegerlas. Los conocidos como administradores de contraseñas permiten el acceso de forma remota en cualquier momento, con lo que ahorramos tiempo con la opción de autocompletar. Pero también puede ser un inconveniente pues al almacenar todas las claves en un mismo lugar, si un pirata informático accede a nuestro administrador tendrá acceso a todas al mismo tiempo. Además de que, al protegerlo con una contraseña, la olvidemos y sea la pescadilla que se muerde la cola.