OpenAI asegura que DeepSeek ha sido entrenada con ChatGPT

Es el tema del momento en el panorama tecnológico, la irrupción de la IA DeepSeek ha sido como la de un elefante en una cacharrería. Y la actualidad sin duda nos está dando información relevante cada pocas horas, una de ellas tiene que ver sobre la manera en que la empresa china ha conseguido desarrollar una IA como esta en tan poco tiempo y de manera tan eficiente. Pues bien, parece que los asiáticos habrían utilizado la IA de sus competidores para entrenarla, algo que no decimos nosotros, sino la propia OpenAI.

Se ha entrenado con ChatGPT

Eso es lo que aseguran desde Financial Times, el rotativo que ha podido conocer de primera mano la opinión de OpenAI respecto de la irrupción de esta inteligencia artificial, que en sus primeras horas se ha mostrado prácticamente tan inteligente y potente como el propio ChatGPT de la firma que lidera Sam Altman. La clave es que tanto OpenAI como Microsoft están realizando sendas investigaciones para comprobar si la IA china ha utilizado sus modelos para entrenarla.

Según OpenAI, tras sus primeras investigaciones, estarían en posesión de pruebas que indican que DeepSeek se habría entrenado con los modelos de OpenAI mediante una técnica de Destilación. Un método que a base de insistir con el mismo tipo de preguntas una y otra vez puede llegar a extraer información del modelo al que pregunta. De esta manera, DeepSeek se habría entrenado usando datos de la IA de OpenAI, violando sus políticas de servicio, y accediendo a datos sin su autorización.

Por tanto, parce que esto solo es la punta del Iceberg sobre lo que estaría por venir. Y es que es evidente que las grandes tecnológicas norteamericanas no se van a quedar de brazos cruzados. Y van a intentar desprestigiar y en casos extremos, demandar a la IA china por haberse valido del conocimiento ajeno para lanzar su propia IA. DeepSeek no es una IA más, y la principal razón de todo este terremoto viene de la singular relación de prestaciones y coste de la que presumen sus creadores.

Esto es lo que ha desatado el nerviosismo en Silicon Valley, donde OpenAI, Microsoft o Meta miran con recelo un modelo de negocio con un 80% o 90% menos de inversión, que ha conseguido prácticamente los mismos resultados que sus competidores en cuestión de horas. Ahora falta por saber si ese menor precio también influirá en el coste de las posibles suscripciones que aparezcan en adelante, para utilizar servicios Premium de la IA, que también podrían ser mucho más agresivas. Esto no ha hecho más que comenzar, y se espera que la polémica alrededor de la IA china, que ya muchos acusan de ser otro aparato del partido comunista chino, siga creciendo en los próximos días y semanas.

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