DATOS PERSONALES

¿Sabes qué información recopila Google Bard sobre ti?

Desde que Google lanzó su Chat Bot de IA, lo ha implementado en otras herramientas como Drive y Gmail. Sin embargo, el acceso de Inteligencia Artificial a tantos datos personales está planteando dudas sobre la privacidad

La privacidad es lo más importante

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La inteligencia artificial ha llegado para quedarse. Desde el momento en el que la gente supo de la existencia de diferentes aplicaciones que solucionaban dudas, trabajos, apuntes, etcétera, el uso de estas páginas creció exponencialmente.

Ya han sido muchos los centros de trabajo y las universidades que han prohibido el uso de estas herramientas debido a cuestiones éticas o de propiedad intelectual y, sin embargo, lo que están haciendo los creadores ha sido perfeccionar las funciones de las mismas. El último en llegar ha sido Google, quien a través de su herramienta Bard, ha implementado la Inteligencia Artificial en el día a día de numerosos usuarios.

Google Bard es lo nuevo que ha desarrollado Google, para tener una herramienta propia en el campo de la IA y competir directamente con ChatGPT, la Inteligencia Artificial que revolucionó Internet hace unos meses, donde el usuario recibe información al instante sobre el tema que quiere tratar.

Pese a ello, no todo son buenas noticias, existen seriad dudas en torno a la privacidad de este tipo de herramientas. Google Bard almacena los datos de la persona que la utiliza durante 18 meses. En su política de privacidad lo detalla y no simplemente guarda los datos de búsqueda sino también la ubicación del dispositivo utilizado y la IP desde la que se consulta la cuenta personal.

MyActivity, la herramienta para configurar nuestra privacidad

Aunque desde la plataforma se justifican argumentando que esta información se guarda para mejorar el servicio, es normal que el usuario tenga dudas sobre la privacidad. Desde la página de MyActivity, se puede configurar el tiempo que transcurre hasta la eliminación definitiva de nuestros datos. Además, se podrán eliminar manualmente aquellas consultas que consideremos oportunas o, si por el contrario seguimos teniendo muchas dudas sobre la privacidad respecto al uso de nuestros datos, podemos pausar la actividad de Bard.

A raíz de ese momento, la información que Bard aportará puede que sea de menos utilidad ya que será más genérica pero es la única forma de la que se sentirse más seguro.

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