CONTRA TODO PRONÓSTICO
Starlink recorta los precios de su Internet por satélite
Es el Internet de Elon Musk.
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Elon Musk es el magnate tecnológico por excelencia, estando detrás de iconos como Tesla SpaceX o StarLink. Esta última gran empresa busca democratizar el Internet mediante conectividad satélite, y para ello está inundando la órbita terrestre de cientos de satélites que darán este servicio. Es una excelente opción para llevar Internet a los lugares más recónditos de la tierra, también los españoles, y solo tiene un punto flaco, su elevado precio. De media contar con esta conectividad nos sale por 100 euros mensuales, más un desembolso inicial, algo que podría cambiar pronto.
Rebaja del precio en algunos países
La realidad es que la rebaja de precio ha llegado de forma desigual, ya que no todos los países van a disfrutar de ella, al menos de momento. Sin hacer anuncio oficial alguno, lo que sí se ha podido comprobar es que en algunos países el precio de esta conectividad ha bajado notablemente. Uno de los más llamativos es Croacia, donde el precio de la cuota mensual ha bajado desde los 106 dólares a los 49 dólares, menos de la mitad de la anterior tarifa. Hay otros países donde el precio no se ha reducido tanto, como en Países Bajos, donde ha pasado de 124 euros a 105 euros.
En las comunicaciones de Starlink con sus clientes se asegura que estas nuevas tarifas tienen efecto inmediato desde el 24 de agosto, y que no deben hacer nada para beneficiarse de estas reducciones, por lo que es de esperar que el precio del siguiente recibo sea mucho menor. Aquí en España el precio es también más asequible que hace unos meses, aunque se encuentra a caballo entre los que hemos visto en Paises Bajos y Croacia. En el caso de España la suscripción mensual ahora es de 70 euros. Mientras el desembolso inicial que debemos hacer, que incluye el router específico y la antena para conectarse al satélite, es de 390 euros, cuanto antes era prácticamente de 500 euros.
Por tanto, es evidente que poco a poco Starlink está ajustando sus precios para hacerlos más competitivos frente a otras alternativas de fibra óptica. Pero la realidad es que el público objetivo de esta tecnología es precisamente aquel que no puede tener acceso a esas conexiones de fibra, en zonas rurales y alejadas de conexiones de cable, que por otro lado cada vez están más extendidas. No obstante, es una gran alternativa, a la que muchos vamos a estar atentos en los próximos meses, sobre todo para comprobar si su precio realmente se ajusta a lo que esperamos muchos, y se convierte en una alternativa tan barata como la fibra.
Sin duda lo que más echa para atrás de StarLink es ese desembolso inicial de 400 euros. Quizás sin ese gasto habría más usuarios que probarían esta conexión a StarLink. De todas formas, algo es algo, y parece que los de Musk están haciendo más asequible un servicio con vocación de multitudinario, un bien de primera necesidad en muchas zonas aisladas del planeta.
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