Apple lo admite, los iPhone 15 se calientan más de lo normal

Hace unos días saltaban todas las alarmas alrededor de los nuevos iPhone 15, los teléfonos más avanzados de Apple hasta la fecha. Y es que se había podido comprobar que estos nuevos modelos estaban calentándose mucho más de lo habitual. Siempre se tiende a pensar que sea algo puntual, de un determinado usuario por una situación coyuntural. Pero se ha podido comprobar que no, que ha sido algo generalizado. Tanto es así, que la propia Apple ha reconocido el fallo, y ya está trabajando en una solución para atajar los problemas de temperatura.

Actividad en segundo plano muy intensa

Apple ha reconocido que existe un fallo de iOS 17, que es el que está provocando que esto ocurra, un sobrecalentamiento del dispositivo. Por lo visto todo esto tendría que ver con las actualizaciones de aplicaciones, que durante los primeros días de uso del dispositivo son muy intensas y numerosas, ya que toca instalar las apps desde cero, o actualizarlas para adecuarlas al software más reciente en el momento de la adquisición.

Esto es algo habitual en cualquier teléfono móvil, pero en el caso de los iPhone 15 y 15 Pro parece que se ha ido un poco de las manos, y esa actividad en segundo plano es la responsable del calentamiento del dispositivo. No es un fallo de hardware, de la batería que se caliente mucho o que el procesador toque techo de procesamiento, sino que parece que se trata de una mala gestión por parte del sistema operativo.

Desde Apple apuntan a que Algunas actualizaciones recientes de aplicaciones de terceros sobrecargan el sistema, lo que provoca que aumente de esa forma la temperatura del dispositivo. Por eso la corrección de este problema va a venir de dos lados, uno es el de la propia Apple, que hará los cambios necesarios en iOS 17 para que se gestionen de una mejor forma las cargas de trabajo en segundo plano.

Y en segundo lugar, serán los propios desarrolladores de esas apps de terceros que también están provocando problemas en la gestión de los recursos, los que realicen cambios en sus apps y lancen actualizaciones para que esto no vuelva a ocurrir. Por tanto, parece que Apple reparte las culpas también con los desarrolladores de las apps.

Y es que no es raro que ocurran este tipo de cosas. La gestión de las apps en segundo plano suele ser uno de los aspectos más críticos a los que se enfrenta cualquier smartphone, tenga el sistema operativo que tenga. Y es que una mala gestión de esos procesos en segundo plano puede llevar al teléfono a aumentar la temperatura de manera notable, y no solo hablamos de smartphones, sino también de ordenadores de sobremesa o portátiles.

Esto además suele provocar que con el aumento de temperatura también aumente el gasto de energía, y por tanto terminemos viendo cómo además de estar más caliente, el dispositivo ejecuta las tareas de forma más lenta e incluso llega a bloquearse por completo de manera temporal. Esperemos que todo se solucione con esto, y que no haya de verdad un problema de hardware como apuntaba uno de los analistas más cercanos a Apple, Ming-Chi Kuo.