Para sus iPhone de 2020
Apple utilizará pantallas chinas para reducir costes en sus iPhone
Apple tiene pensado dar un portazo a Samsung y comprar otras pantallas OLED más baratas en el mercado chino.
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Los iPhone siempre han sido sinónimo de móviles de calidad, casi de lujo desde un cierto punto de vista, de hecho el público que utiliza estos móviles vanaglorian de que cuentan con el móvil más exclusivo del mercado, algo de lo que no les falta razón, partiendo de sus altos precios y un sistema operativo exclusivo. Algo que presupone que estos teléfonos a su vez cuentan con los mejores componentes posibles. Y así ha sido hasta ahora, cuando Apple ha contado con las pantallas OLED suministradas por Samsung para equipar a sus teléfonos. Pero parece que Apple está buscando la manera de reducir costes en la producción de sus iPhone, y todo apunta a que las pantallas son el principal sobrecoste que ha tenido que afrontar Apple para poder contar con pantallas OLED, y por tanto, el principal gasto a reducir.
Apple dejará de utilizar pantallas de Samsung
Aunque son enemigos y oponentes en el mercado de móviles, Samsung es el principal fabricante de pantallas OLED del planeta, y cuenta con 90% de la cuota de mercado en suministros a fabricantes de móviles, mientras que LG, su principal oponente, solo cuenta con 10%. Pues bien, el mayor sobrecoste que ha observado la producción del iPhone ha sido precisamente el de las pantallas OLED de Samsung, y por esa razón ahora Apple va a optar por utilizar pantallas de origen chino para abaratar los costes de sus teléfonos. Algo lógico si se quiere trasladar una reducción de precio a los usuarios, aunque cuestiona evidentemente la calidad de los componentes de los futuros iPhone.
Parece que Apple va a confiar en el fabricante de pantallas chino BOE Technology Group, según hemos conocido gracias a Nikkei Asian Review. Esta empresa china ha crecido a la sombra de los estímulos del gobierno chino para poder hacer frente a la competencia en este campo de las empresas coreanas, que son sin duda alguna las que dominan el mercado de este tipo de componentes básicos para los smartphones. La idea de Apple es reducir los costes de producción para poder integrar una pantalla OLED en el próximo iPhone XR que veríamos en las tiendas en 2020. Pero este cambio de componentes también afectaría a los iPhone de gama alta, que también podrían beneficiarse de esa reducción de los costes.
Las pantallas OLED con las que contarían los nuevos iPhone de 2020 serían de 5,42 pulgadas para el iPhone estándar, de 6,06 para el equivalente al iPhone XR y de 6,67 pulgadas para el iPhone más caro de todos. Las pantallas OLED de Samsung le suponen a Apple 110 dólares de coste en el iPhone XS y de 120 dólares en el iPhone XS Max. Apple espera reducir el coste de las pantallas en un 20% gracias al fabricante chino, que como decimos está aprovechando los incentivos del gobierno chino para crecer rápidamente. Ahora bien, en este clima de guerra comercial en el que nos movemos, parece algo temerario por parte de Apple apostarlo todo por un fabricante chino, que además está siendo ayudado por el gobierno chino para ganar terreno frente a las empresas surcoreanas, que son además los socios comerciales naturales de Estados Unidos.
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