Cómo activar una segunda línea de teléfono en tu iPhone

El problema de quienes tienen que llevar dos teléfonos encima es evidente: hacer hueco en los bolsillos de los pantalones, o en los bolsos, para ir a todas partes con sendos terminales en los que es posible recibir llamadas o mensajes dependiendo de la naturaleza de lo que nos quieran comunicar. Por un lado los temas personales y por otro los laborales, que siempre parecen mucho más urgentes e inmediatos.

Por suerte, los teléfonos móviles han evolucionado prácticamente a la vez que las necesidades de los usuarios y, aunque hace algunos años exhibir esa característica de permitir una doble SIM era visto como una rareza, hoy en día es muy complicado no encontrar modelos que no nos permitan llevar dos líneas dentro del mismo terminal. Por ejemplo, la personal y la que nos obligan en nuestro trabajo donde quieren que estemos permanentemente localizados.

Así que si este es tu caso, vamos a contarte cómo dar de alta una segunda línea en tu iPhone que, desde 2018 con los modelos XS, ya permiten añadir lo que los de Cupertino llaman un "plan móvil" extra que requiere de un proceso de alta sensiblemente distinto al tradicional de las tarjetas SIM físicas, ya que se trata de la modalidad electrónica.

¿Cómo activar una segunda línea en tu iPhone?

Lo primero que debéis hacer para dar de alta una nueva línea móvil es hablar con vuestro operador para saber si permite este tipo de servicio de tarjetas eSIM. Estas, a diferencia de las tradicionales, solo pueden activarse a través de un papel con un código QR que debemos escanear con la cámara del móvil. De ahí que el paso previo sea conseguir una de estas en una tienda oficial para llegar hasta el primero de los pasos.

Una vez que tenemos la tarjeta con el código QR lo sacamos del precinto de plástico, lo ponemos bien a la vista y en el iPhone nos vamos a los "Ajustes", posteriormente a los "Datos móviles" y, por último, a "Añadir plan móvil". Eso encenderá la cámara, que tendremos que apuntar hacia el código de barras para escanearlo. Ese proceso es prácticamente instantáneo por lo que a continuación debemos introducir nuestro usuario y contraseña en la página de inicio del operador (nos redirigirá el teléfono).

Tras un par de menús distintos el iPhone necesitará unos segundos para dar de alta la SIM electrónica y configurarla dentro del terminal. A partir de ahí será necesario que le digáis al smartphone cuál de las dos tarjetas será la que mande sobre la otra. Es decir, con cuál haremos las llamadas por defecto y con cuál consumiremos los megas de la tarifa de datos móviles. Aunque esto podremos cambiarlo más adelante, es importante dar prioridad a la línea de la que más uso vayáis a dar.

Decir, de todas formas, que activar una no bloquea a la otra y cualquier llamada que recibamos llevará un identificador de a qué línea están llamando. Y al revéis, al marcar un número podremos especificar con qué SIM queremos que realice la comunicación para aquellos casos en los que alternéis cuestiones personales con profesionales.