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7 consejos para viajar a Praga, una ciudad que desprende magia
Si estás pensando en poner rumbo a la capital de la República Checa, ¿qué consejos debes tener en cuenta?
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Praga es una de las ciudades con más encanto de Europa, y no es para menos. Por ese mismo motivo, cada vez son más las personas que no dudan un solo segundo en poner rumbo a la capital de la República Checa para recorrer su casco antiguo y dejarse llevar por su encanto.
Pero, si estás pensando en organizar un viaje a Praga, es importante tener en cuenta una serie de recomendaciones. Todas ellas te serán realmente útiles para aprovechar, al máximo, cada día que pases en esa ciudad. Estamos completamente convencidos de que merecerá mucho la pena.
La mejor época para viajar a Praga
En este caso, tanto la primavera como el otoño son épocas absolutamente perfectas, puesto que en esas fechas viaja menos gente y las temperaturas son realmente agradables. En verano hay más posibilidad de encontrarse con muchas más personas. Eso sí, también recomendamos viajar hasta la capital de la República Checa en invierno, coincidiendo con la época de Navidad, ya que encontrarás mercados navideños con mucho encanto.
Cambio de dinero
Es uno de los grandes hándicaps de este viaje, pero no supone ningún problema. Muchos son los que deciden cambiar euros en España, en su banco, y llevarlos encima hasta Praga. Pero, sinceramente, es mucho más cómodo pagar todo con tarjeta. Si prefieres tener algo de efectivo, puedes sacarlo de un cajero que puedes encontrar en el centro de la ciudad. Eso sí, para evitar pagar comisiones y tener actualizado el cambio, es recomendable utilizar la Tarjeta N26 o la Tarjeta Revolut. Son gratuitas y pueden suponer un gran ahorro.
¿Cómo llegar del aeropuerto al centro de Praga?
Hay muchas opciones, algunas más cómodas que otras. Puedes optar por un taxi o un vehículo privado que te lleve directamente al hotel, pero también hay otras variantes más económicas. Es el caso del autobús, concretamente el Bus 119 que te lleva a la estación Nádrazí Veleslavín, y el Bus 110, que se dirige a la estación Zlicín. Si llegas a la ciudad de madrugada, hay otra opción que es el Bus 510 que te dejará en un punto bastante próximo a la Plaza Wenceslao.
¿Cómo moverme por Praga?
Uno de los grandes puntos positivos de esta ciudad es que prácticamente todos los atractivos turísticos están en el casco antiguo, por lo que puedes visitarlos perfectamente a pie. Eso sí, si por lo que sea prefieres utilizar el transporte público, puedes utilizar cualquiera de las tres líneas de metro, siendo la A (verde) la más utilizada. No podemos dejar de mencionar el tranvía, que opera las 24 horas. El que más se usa es el tranvía 22, puesto que es el que te lleva hasta la colina del Castillo de Praga. Puedes comprar un billete sencillo o un abono para todo el día.
Imprescindibles para ver en Praga
Siempre es recomendable tener una pequeña lista de cosas que ver cuando vas a una ciudad. En Praga no podía ser menos. Entre los rincones imprescindibles para conocer está la plaza de la Ciudad Vieja, donde encontraremos el famoso Reloj Astronómico, la torre del Antiguo Ayuntamiento y hasta la imponente Iglesia de Nuestra Señora de Týn.
No dejes pasar la oportunidad de pasear por el Barrio Judío y entrar en el Antiguo Cementerio Judío, una de sus grandes joyas. También merece la pena conocer, en primera persona, el Clementinum, la Torre de la Pólvora y, cómo no, el imponente y espectacular Castillo de Praga, entre otras edificaciones.
Si hay algo que caracteriza a esta ciudad es que hay un gran número de construcciones, monumentos y rincones que no dejan absolutamente indiferente a nadie. Por lo tanto, te recomendamos que contrates algún tour por la ciudad, ya sea el básico o alguno más específico, para conocer su historia en profundidad.
¿Qué comer en Praga? Platos típicos
Una de las numerosas razones por las que visitar esta ciudad es precisamente por su curiosa y peculiar gastronomía. Encontramos platos de carne como son el Goulash (ternera guisada con especias), el Knuckle (codillo de cerdo) o Schnitzel (escalope de carne), pero también te recomendamos las Knedliky, que son unas bolas de harina hechas de patata. ¡No te dejarán indiferente!
No olvides lo más importante
Y lo decimos siempre, aunque parece algo obvio: ¡Disfruta de esta ciudad! Déjate llevar por sus calles, su ambiente y, sobre todo, su gente. Son realmente cercanos y te ayudarán en todo lo que puedan. Por lo tanto, ten en cuenta estos consejos pero, sobre todo, este último ya que es un requisito esencial para que tu viaje a Praga sea absolutamente inolvidable.
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