2 leyendas que nos cuentan cuán superticiosa es la isla de Malta

La verdad es que Malta es un archipiélago de larguísima historia que comenzó a escribirse en la Edad de Piedra cuando algunos pescadores de Sicilia se instalaron en estas islas; después llegaron los mercaderes fenicios, también los griegos y por supuesto los romanos; Malta fue después bizantina, árabe y normanda, perteneció a la Corona de Aragón y fue después dominio francés con Napoleón e inglés desde principios del S.XIX de modo que la historia de Malta tal y como la conocemos hoy, como país libre, no comenzó a escribirse hasta los años 60.

Esta larga historiaes lo que explica no solo los ricos vestigios históricos y culturales del archipiélago sino también sus curiosas leyendas y supersticiones entre las que nos llaman la atención estas dos.

La primera de las leyendas que te soprenderá conocer en Malta tiene que ver con sus iglesias ¿sabes por qué cuentan todas ellas con dos relojes en lugar de uno? no es un detalle casual ni carente de importancia (no lo era al menos cuando así se decidió...) y la segunda leyenda que, cargada de superstición, despierta nuestra curiosidad está directamente relacionada con el sector pesquero maltés y sus famosas y coloridas embarcaciones, los luzzu ¿imaginas por qué a cada lado de su proa tienen pintados los ojos de Osiris?.

Dos relojes en las iglesias... para despistar al diablo

No solo es que las iglesias cuenten con dos relojes sino que solo uno marca la hora correcta, de este modo los antiguos creyentes creían despistar al diablo lo suficiente para asegurarse de que los oficios religiosos se celebraban en tiempo y forma sin interrupción alguna del lado oscuro del más allá.

Ojos de Osiris en los luzzu... para ahuyentar a los malos espíritus

Los luzzu que podemos ver el puerto pesquero de Marsaxlokk llaman la atención por su estética, que recuerda a las embarcaciones vikingas, y su rico colorido pero hay un detalle adicional que suele pasar más desapercibido y que en su día se consideraba de capital importancia: se trata de los ojos de Osiris cuidadosamente pintados a ambos lados de la proa de los luzzu ¿cuál era su fin?

Sin duda no era un fin decorativo, según los fenicios tenían una función de protección, eran algo así como un conjuro de buena suerte: ahuyentaban a los malos espíritus y atraían la pesca.