Atomium de Bruselas: 5 curiosidades que no te dejarán indiferente

Bruselas, en Bélgica, es una de las ciudades europeas que, año tras año, recibe más turistas. Y no es para menos. No solamente es considerada como la capital de Europa, sino que es una oportunidad única para dejarse llevar por su historia, sus edificaciones y, sobre todo, ¡por su gente!

Hay diversos elementos que llaman poderosamente la atención a los turistas. Y un claro ejemplo lo encontramos en el Atomium. Debemos tener en cuenta que se construyó por un motivo muy concreto: la Exposición General de Bruselas que se celebró en el año 1958. Con el paso del tiempo, se convirtió en todo un icono de la ciudad. Es el momento de conocer su historia a través de estos datos curiosos.

¿Qué es lo que realmente representa?

Mide, aproximadamente, 100 metros de altura. De esta manera, el objetivo principal era representar, a una escala impresionante, un cristal de hierro. Y cuando decimos “impresionante”, decimos a que está ampliado unas 165.000 millones de veces. ¡Sencillamente espectacular!

¿Quién diseñó el Atomium?

Es importante tener en cuenta que estamos ante una construcción de lo más moderna, a pesar de que se construyó a finales de la década de los 50. El encargado de diseñar el Atomium fue nada más y nada menos que André Waterkeyn. Aunque tenía la nacionalidad belga, lo cierto es que nació en Inglaterra.

No iba a ser una obra permanente

En cuanto a la construcción del Atomium, se dejó claro desde un primer instante que iba a ser una construcción de carácter temporal. En principio iban a ser seis meses, pero tuvo tan buena acogida que se decidió no desmontarlo. A pesar de que estemos ante una construcción relativamente joven, se ha tenido que remodelar en un par de ocasiones.

¿De qué está compuesto el Atomium?

Es importante saber que esta característica construcción está formada por un total de 9 esferas, de unos 18 metros de diámetro cada una. Una de las curiosidades que más llama la atención a los turistas es que se puede entrar en el interior de estas esferas, ya que se prepararon especialmente para que los visitantes pudieran acceder a ellas. Además, en el interior hay exposiciones temporales pero también una permanente sobre la historia de su creación y de la propia Exposición General de Bruselas de 1958.

¿Sabías que tiene un restaurante?

Esta es otra de las cuestiones que llama poderosamente la atención. Y es que en el interior del Atomium de Bruselas podemos encontrar un restaurante. No solamente comeremos dentro de una obra de arte, sino que obtendremos una de las mejores vistas panorámicas de la capital de Bélgica. ¡Es verdaderamente mágico!

...

También te puede interesar...

El truco para conocer todas las restricciones de todos los países del mundo al instante