TE LO CONTAMOS
El castillo medieval de Cataluña que ahora es un parador y es perfecto para el turismo familiar
Si tienes pensado hacer una escapada en familia, no puedes perderte el Parador de Tortosa, que se encuentra junto al Castillo de la Zuda. Te contamos cómo es y todo lo que puedes ver en este municipio de Tarragona.
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En Viajestic nos encantan los paradores ya que son unos alojamientos maravillosos donde puedes conocer la historia y la cultura que hubo tiempos atrás. Recientemente te hablábamos del Parador de Cervera de Pisuerga, uno de los más bonitos para ir en otoño y que está en un parque natural.
Y ahora queremos hablaros del Parador de Tortosa, que se encuentra junto al castillo de la Zuda. Es un edificio de nueva planta perfectamente integrado en el conjunto monumental, que destaca por los altos muros y grandes ventanales góticos.
Esta fortaleza es de origen musulmán y está elevada sobre un pequeño montículo a orillas del río Ebro. Desde su privilegiada posición, a 59 metros sobre el nivel del mar, el castillo domina la ciudad antigua de Tortosa.
Declarado Bien Cultural de Interés Nacional, destaca por la multitud de torres defensivas, de varias formas: pentagonales, circulares y cuadradas. El conjunto constituye un excepcional mirador sobre la ciudad y el valle del Ebro.
Así es el parador de Tortosa
El parador dispone de amplias y cómodas habitaciones, piscina exterior y elegantes salones para reuniones y eventos. Su posición elevada regala una preciosa vista del Delta del Ebro y del conjunto histórico-artístico de la bella ciudad de Tortosa.
El Parador de Tortosa está certificado por la Generalitat de Catalunya y, avalado por la Federación Española de Familias Numerosas, como destino de turismo familiar. Puedes alojarte en el parador este mes de octubre desde los 82 euros.
Qué ver en Tortosa
En Tortosa no puedes perderte, además de la fortaleza, la Catedral de Santa María, el barrio judío, las esculturas que forman el museo al aire libre de los Jardines del Príncipe y los Colegios Reales, entre otros muchos monumentos.
Pero sin duda, lo mejor es que hagas alguna ruta para descubrir sus puentes, calles, plazas y paseos y llenarte de su rica arquitectura y paisaje.
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