Iglesia de San Andrés: ¿sabías que en ella se encuentran los restos de San Isidro Labrador?

Es el momento más que perfecto para poner rumbo a Madrid. Se trata de una ciudad absolutamente espectacular, que cuenta con un gran número de monumentos, edificaciones, historias y leyendas que, desde luego, no dejan absolutamente indiferente a nadie. Un claro ejemplo lo encontramos, precisamente, en la Iglesia de San Andrés Apóstol.

Situada en el antiguo arrabal mozárabe, estamos ante una de las iglesias más históricas de la ciudad. Es en este mismo lugar donde encontramos la Capilla de San Isidro, que es el patrón de Madrid. Aunque no se sabe la fecha exacta en la que se erigió, gracias a diversos documentos se puede atestiguar que, en el siglo XII, ya existía esta Iglesia.

Cabe destacar que San Isidro Labrador fue enterrado en 1172 en el cementerio de esta iglesia. Años más tarde, concretamente en 1212, se decidió trasladar sus restos mortales al interior de la Iglesia de San Andrés. Esta Iglesia adquirió gran relevancia en el siglo XV cuando los Reyes Católicos no dudaron un solo segundo en elegirla como Capilla Real.

Es más, se construyó un pasadizo que conectaba esta Iglesia con la residencia de los reyes. Cabe destacar que en el siglo XVI se decidió adosar nada más y nada menos que la Capilla del Obispo que, con el paso del tiempo, acabó siendo un templo completamente independiente.

Es importante tener en cuenta que, en 1535, los restos mortales de San Isidro Labrador fueron trasladados a esta Capilla, lo que originó diversas disputas. Casi dos décadas después, el cuerpo regresó al lugar en el que estaba un principio. Además, en cuanto a la iglesia que conocemos actualmente, nada tiene que ver con la original, que presentaba un estilo mudéjar.

La Capilla de San Isidro Labrador, un lugar a destacar de la Iglesia de San Andrés

Es importante señalar que en 1622, San Isidro fue proclamado Santo por lo que se construyó una capilla en la misma Plaza de San Andrés. Unas obras que concluyeron en 1669. Durante la Guerra Civil Española, fue saqueada y prácticamente destruida.

Por ese mismo motivo, se decidió restaurarla haciendo una serie de modificaciones respecto a la original. Para empezar, la parroquia se reconstruyó en el lugar en el que se encontraba la antecapilla de San Isidro. Además, sobre lo que había sido la iglesia en el siglo XVII, se decidió erigir la nueva casa rectoral. En 1925, este templo fue declarado Monumento Nacional.

La Iglesia de San Andrés, a través de sus leyendas

Una de las más significativas tiene una estrecha vinculación con el conocido como “Milagro del Pozo”, que asegura que el único hijo de San Isidro cayó en un pozo de lo más profundo. El Santo, al ver que no iba a poder salvarle, rezó y, milagrosamente, el pozo comenzó a subir su nivel de agua, por lo que el cuerpo de su hijo se elevó a la superficie.

Otra leyenda de lo más significativa tiene una estrecha vinculación con el rey Alfonso VIII. Y todo porque, cuando se exhumó el cuerpo de San Isidro, que estaba incorrupto, fue visitado por el monarca. Éste reconoció que fue el pastor que le guio en todo momento en la batalla de las Navas de Tolosa.