12 ciudades coloniales que tienes que visitar al menos una vez en la vida

Hablamos de ciudades coloniales y de arquitectura colonial casi por costumbre, porque así lo aprendimos en los libros, pero lo cierto es que habría que hablar más bien de arquitectura virreinal que era la que se desarrolló en los territorios descubiertos al otro lado del mar por Cristóbal Colón en primer lugar y por quienes siguieron después su estela en el mar (Hernán Cortés, Pizarro, Cabeza de Vaca, Diego de Almagro...); ¿y cómo eran esa arquitectura, como eran esas ciudades coloniales? Para responder a esta pregunta puedes recurrir, de nuevo, a los libros de historia y descubrir todos los detalles de la arquitectura virreinal española (su planta, la importancia de sus plazas, el trazado de sus calles, sus casas con balcones...) pero lo mejor es que no tienes que conformarte con eso, puedes recorrer algunas de las ciudades coloniales más famosas y mejor conservadas ¿cuáles son y dónde están? Eso es lo que vamos a contarte a continuación.

Empezamos nuestro recorrido por las ciudades coloniales en Colombia, concretamente en Cartagena de Indias porque esta ciudad, fundada en el S.XVI tuvo una importancia capital gracias a su puerto y eso se nota también en su arquitectura; tan notable es el centro histórico de Cartagena de Indias (la ciudad amurallada) que en 1984 fue reconocida como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO; hoy Cartagena de Indias, a orillas del mar Caribe, es un destino turístico de primer nivel. De Colombia nos vamos a Guatemala para visitar Antigua (o La Antigua), una ciudad colonial ubicada a unos 40 kilómetros de la capital del país y que, como Cartagena de Indias, es también Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO; esta ciudad, cuyo diseño luce una clara influencia barroca, fue capital de la Capitanía General de Guatemala entre el S.XVI y el S.XVIII ¿y por qué dejó de ser la capital? La culpa fue de los terremotos, después de sufrir tres terremotos en menos de 100 años se optó por buscar un emplazamiento más estable, pero la Antigua sigue ahí y se puede visitar.

De Guatemala nos vamos a Perú para visitar dos ciudades coloniales a cada cual más bonita: Cuzco y Trujillo; Cusco fue capital del antiguo imperio inca y se convirtió en una de las ciudades más importantes del virreinato del Perú, tanto es así que fue la última sede del gobierno virreinal antes de la independencia; durante el virreinato se construyeron en Cusco iglesias, universidades, palacios... y bonitas plazas barrocas y neoclásicas; por supuesto la ciudad colonial de Cusco también es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. En cuanto a Trujillo, está ubicada en el valle de Moche y fue fundada por Diego de Almagro en el S.XVI, en la actualidad es una de las ciudades más pobladas e importantes de Perú y su casco histórico, la antigua ciudad colonial, es un atractivo turístico de primer nivel.

En Cuba destacamos dos ciudades coloniales: la Habana Vieja con su plaza y su catedral, tan bonita que es Patrimonio de la Humanidad y por supuesto una visita imperdible en Cuba no solo para verla sino también para vivirla, en la zona podrás ver edificios coloniales, mercadillos y bares en los que disfrutar de un mojito en la Habana Vieja; y Trinidad, que es una de las ciudades coloniales mejor conservadas de Cuba e incluso de América, de ahí que haya sido reconocida también como Patrimonio Mundial de la Humanidad por la UNESCO.

Quito, capital de Ecuador y ciudad en mitad del mundo, tiene también un casco histórico colonial, es decir, fue también ciudad colonial y fue, junto a Cracovia en Polonia, la primera ciudad declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO; el origen de la ciudad es antiquísimo, por supuesto, pero lo que se conserva de su época colonial desde su fundación en 1541 es un patrimonio de tal riqueza que no querrás perdértelo... (iglesias, capillas, monasterios, conventos, plazas, museos...). También es una ciudad colonial importante Potosí, en Bolivia, y es que es Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO en gran medida por su arquitectura, es más, Potosí es la cuna del barroco andino aunque el origen de esa importancia arquitectónica está en la plata: Potosí se fundó, construyó y prosperó al calor de la explotación de los yacimientos de playa de la zona.

En México nos quedamos con San Miguel de Allende, en el estado de Guanajuato, una ciudad que no solo nos ofrece su rico patrimonio colonial sino que es además uno de los pueblos mágicos de México; fue fundada en 1542 por un fraile franciscano (Fray Juan de San Miguel) y reconocida como Patrimonio Cultural de la Humanidad en 2008; en Nicaragua cabe destacar la ciudad de Granada que, fundada en 1542, es una de las más antiguas del país; Granada es famosa por su arquitectura colonial y por ser lugar de encuentro de poetas gracias a su Festival Internacional de Poesía (un festival que le ha valido también el apodo de La París de América Central).

Completamos nuestra docena de ciudades coloniales en Puerto Rico y en la República Dominicana con el Viejo San Juan, con sus calles adoquinadas y edificios coloridos, sus tiendas, sus museos, sus restaurantes, plazas, iglesias e incluso una catedral, la Catedral Metropolitana de San Juan; y Santo Domingo, que es una de las ciudades coloniales más antiguas, es más, Santo Domingo pasa por ser el primer asentamiento europeo en el nuevo mundo: allí podrás visitar la primera catedral y el primer castillo de América, ambos en una ciudad colonial que es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

¿Más ciudades coloniales que te encantaría visitar? Las hay, claro que sí... Lima o Arequipa en Perú, Cuenca en Ecuador, Sacramento en Uruguay, Santa Cruz de Mompox en Colombia...

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