Apulia, un magnífico y poco conocido destino de Italia en primavera

Cuando pensamos en Italia pensamos en Roma y en Florencia, en Nápoles, Sicilia o la isla de Capri, en Milán, el lago Como y por supuesto también en un roadtrip por la Toscana pero solemos olvidar el tacón de la bota, la zona de Apulia que, especialmente en primavera, es realmente espectacular. Te contamos por qué.

Sobran las razones para visitar Apulia en cualquier época del año de Foggia a Lecce pasando por Barletta Adrian Trani, Bari, Taranto y Brindisi: los Trulli de Alberobello, la ciudad medieval de Ostuni, el Templo antiguo de Canosa di Puglia, el Castel del Monte, la Torre SantÁndrea (que es algo así como las catedrales de Ribadeo pero en el Adriático)… entre otras muchas razones pero estas a las que hemos hecho referencia están ahí en cualquier época del año y nosotros queremos recomendarte Apulia, además y especialmente, en primavera ¿imaginas por qué? Seguro que ya estás pensando en el campo y sus flores…

Ciertamente son las flores las que nos hacen ponernos Apulia por destino en primavera pero no unas flores cualesquiera, unas de las más bellas, las orquídeas; y es que en Apulia es donde está el Parque Natural de Gargano que es el que ofrece una mayor densidad de orquídeas salvajes: son unas 200 las variedades de orquídeas salvajes conocidas en el mundo, y unas 80 de todas ellas se pueden ver en Apulia: entre abril y mayo están en plena floracióny ofrecen un espectáculo inolvidable.

Gargano está en el conocido como el espolón de la bota de Italia, es famoso por sus bosques de pinos y olivares, también por los espectaculares acantilados de piedra caliza de sus costas y por supuesto también por sus playas pero, en primavera, son las orquídeas las que atraen la atención de quienes visitan esta zona de Italia porque no hay en el mundo una concentración mayor de orquídeas salvajes que aquí, en Gargano, durante los meses de abril y mayo.

¿Cómo disfrutar de la belleza de las orquídeas en Gargano? Recorriendo el Sendero de las Orquídeas, una ruta de ida y vuelta que se completa en apenas dos horas y que es, además, apta incluso para quienes no están en un estado de forma óptimo porque no ofrece dificultad alguna; además desde este sendero gozarás de espectaculares vistas de la costa y podrás visitar las ruinas de la la Abadía del Monte Sacro.