Descubrimos Madeira a través de sus bailes y sus sabores

Decía Heminway que en Madeira podías gozar de la ‘experiencia más apasionante jamás vivida’ y, conociendo al personaje, sabemos que no se refería a la rocosa costa de esta isla ni a sus paisajes verdes y agrestes sino a experiencias más cercanas sus bailes y sus sabores, a sus tradiciones.

En Madeira celebran las Fiestas de Carnaval y la Fiesta de la Flor, el Festival del Atlántico, la Fiesta del Vino y, por supuesto, las Fiestas de Fin de Año; y entre romería y romería tienen tiempo para mantener tradiciones tan notables como la del bordado a mano, un bordado fino y estiloso que cuenta ya con más de 150 años de historia y es, además, de fama internacional.

Si visitas Madeira en primavera o verano raro será no disfrutes de alguna romería, arrasáis las llaman ellos, en alguna de las parroquias de la isla, son fiestas populares que llenan las calles de música y color porque se engalana con banderas coloristas y suenan desde bandas filarmónicas a otras que tocan ritmos más modernos; tampoco faltan los mercados y mercadillos con sus puestos de madera y adornados con laurel y otras hierbas.

Y luego están las cosas de comer, la más espectacular de todas ellas sea, probablemente, la Espetada Regional (¿estás pensando en los espetos malagueños? ¡Olvídalos!): se trata de pan cinco elaborado a base de carne de vaca cortada en dados que se coloca en un pinchito de laurel y se asa en los braseros que se colocan cerca de los puestos de madera de los mercadillos; otro bocado típico de Madeira es el llamado ‘bolo do caco’, de origen árabe, que se come con mantequilla de ajo, pulpo o camarones preparados de mil maneras, bandas, aguacate, chirimoya… ; todo ello se acompaña de vino de la región o de una laranjada (zumo de naranjas de Madeira). Y, para terminar, los bocados dulces: pastel de miel y galletas de miel (también llamadas broas).

Hay una experiencia más que, estamos seguros, hubiera encantado a Hemingway… Madeira se ha convertido en un gran productor y proveedor de caña de azúcar y por eso en la isla se puede disfrutar actualmente de la Ruta de la Caña de Azúcar y sobre todo de la Ruta del Ron de Madeira…

El curioso 'tobogán' de un pueblo Madeira que antes era un medio de transporte