Estos son los 7 restaurantes vieneses que decoran su interior en un jardín

La restauración ha sufrido la pandemia intensamente, tanto que se ha transformado; para no tener que cerrar sus cocinas a cal y canto ya durante los días oscuros de los confinamientos, ya fueran totales o parciales, muchos restaurantes optaron por centrarse en el servicio a domicilio y en preparar comidas para llevar (recoger en el local) porque ese era el único modo en que podía atender a sus clientes; los que contaban con un espacio exterior y en la época en la que la climatología acompañaba, lo tenían un poco mejor pero, en todos los casos, el esfuerzo de los chefs por mantener sus cocinas abiertas fue inmenso.

Pero la transformación de la resturación ha ido más allá de sus servicios incluso cuando sus servicios buscaban la excelencia en las entregas a domicilio con las dificultades que eso supone tanto de packaging como de transporte para que la comida llegue en su punto; ha llegado también a su interiorismo porque muchos restaurantes han aprovechado los días de cierre para reformar sus locales o incluso para planificar nuevas aperturas y una de las cosas que todos tenían claro es que ahora buscamos espacio y naturaleza por eso tantos restaurantes presentan un interiorismo con tintes de paisajismo. Hemos descubierto que en Viena hay nada menos que 7 nuevos o renovados restaurantes que crean ambiente, esencialmente, con vegetación. A continuación te contamos cuáles son y dónde encontrarlos porque seguro que, si viajas a Viena, te encantará probar alguno de ellos, naturalmente.

Chez Bernard es el restaurante de un nuevo hotel vienés, el Hotel Motto, está en la séptima planta y, como es también bar, atrae tanto a quienes visitan la ciudad como a quienes viven en ella; se trata de un local en el que disfrutar de la alta cocina y la alta coctelería y, hablando de alturas... Inaugurará en breve su terraza con vistas a los tejados de Viena. El Hotel Motto, con Chez Bernard en su séptima planta, está en Mariahilfer Strasse 71a.

El Adlerhof no es nuevo pero sí distinto y es que ha aprovechado la pandemia para transformarse; cuentan quienes lo conocían antes de la pandemia que solo conserva de su vida anterior el nombre aunque sigue siendo, como lo era antes, un típica tasca vienesa decorada con plantas de invernadero. El Adlerhof está en Burggasse 51.

El Ponykarussell es famoso por sus desayunos, también por su decoración en la que destacan los papeles pintados con motivos de plantas y animales y el órgano situado en el centro del local; se trata también de un espacio histórico de Viena pues aquí había una atracción con ponys integrada en el parque de atracciones del Prater. El Ponykarussell está en Karl-Kolarik-Weg, 1, Prater 86a.

Calienna es un café y ya en 2020 optaron por rendir su interiorismo a las plantas, en particular a las plantas exóticas; además este local es más que un café, es tambíen una tienda y un estudio creativo, un lugar muy sugerente que no querrás dejar de visitar en Viena. El café, tienda y estudio Calienna está en Neubaugasse 68.

Palmenhaus es otro de los restaurantes que ya se había rendido a las plantas antes de la pandemia, y es que se trata de un invernadero histórico: fue la última gran orangerie de los Habsburgo que, hasta la proclamación de la República, era de uso esclusivo de la familia imperial; ahora es una brasserie en un invernadero y es también poopular por sus desayunos y sus cócteles de afterwork y media tarde. Palmenhaus está en Burggarten, 1.

El Hansen está en el sótano del antiguo edificio de la Bolsa de Viena y, dado que comparte espacio con la mejor tienda de Viena para comprar plantas y maceteros entre otros detalles decorativos, lo tenía fácil. En su carta manda la cocina italiana y se renvueva regularmente. El Hansen está en Wipplingerstrasse, 34.

Hannelore es un bar de copas que completa su decoración vegetal con un árbol en medio del local; es el club de cócteles más actual de la ciudad y eél podrás degustar hasta 24 tipos de ginebra aunque su cóctel más famoso es un daiquiri, el Rabbithole Daiquiri, de color naranja chillón. El Hannelore está en Dorotheergasse 6/8.

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