Estos son algunos de los belenes más bonitos del mundo

Lo de montar el Belén es una tradición de esas que nos gustan desde niños porque colocar el Árbol de Navidad y el Belén, abrir la primera tableta de turrón y degustar los primeros polvorones es empezar a vivir la Navidad, una época que asociamos a las luces de colores, los regalos, las fiestas, la ilusión… Pero ¿de dónde viene la tradición de montar el Belén? ¿Desde cuándo lo hacemos? Hay que remontarse mucho en el tiempo para descubrirlo y también hay que viajar a Italia porque se cree que fue allí donde se montaron los primeros belenes (también llamados pesebres o nacimientos).

Se cree que el primer Belén se montó allá por el S.XIII en Italia, concretamente en Asís, y fue idea del propio San Francisco de Asís; cuenta la leyenda (porque aquí cabe hablar de leyendas…) que el niño que colocó San Francisco de Asís era de piedra y el abono y el buey que puso a su lado eran de verdad ¿qué sucedió? Que cuando San Francisco cogió al niño en brazos éste se convirtió en humano y, desde entonces, en recuerdo de este milagro, los italianos comenzaron a montar el Belén en sus casas.

¿Y cómo llegó esta tradición a España? De la mano del rey Carlos III, también rey de Nápoles porque el propio rey y también su esposa se enamoraron de los belenes napolitanos, belenes que al llegar a España enamoraron a su vez a los españoles… y desde entonces hasta hoy.

¿Dónde están los belenes más espectaculares del mundo? Empezando por los más cercanos nos quedamos con el Belén del Príncipe que se coloca cada año en el Palacio Real de Madrid porque se trata de un belén napolitano que nos acerca al origen de esta costumbre en nuestro país; otros belenes que cada año atraen a miles de personas son el Belén de arena de Las Palmas de Gran Canaria y el Belén de chocolate de Rute, en Córdoba, ambos belenes efímeros y espectaculares como es espectacular también el Belén gigante de Zaragoza. Volviendo a Madrid cabe recordar también los belenes tanto de la Comunidad de Madrid como el del Ayuntamiento, que este año presenta como novedad su estructura: es circular, es decir, puede observarse desde todas las perspectivas.

Más allá de nuestras fronteras podemos ver Belenes bonitos por toda Europa pero la ruta tiene que empezar por el lugar de origen del Belén, Italia: el Belén del Vaticano es de visita obligada, el pasado año era un Belén andino ¿cómo será el de este año? lo sabremos pronto... Otro Belén italiano espectacular es el Belén viviente de la localidad de Matera; la República Checa es otro destino ideal para disfrutar de bellos belenes, podrás verlos tanto en las iglesias de Praga pero lo que no querrás perderte es la exposición de pesebres que se celebra en la parte subterránea de la Capilla de Belén, en el antiguo barrio judío de Praga; en Karlstejn descubrirás otro museo de pesebres que te dejará sin palabras, los hay clásicos pero también de materiales como cera, azúcar o pan, además el pesebre de marionetas más grand e de la República Checa está aquí mientras el pesebre mecánico más grande, registrado en el Libro Guiness, está en Kryz; ¿más belenes checos? El más valioso del país está en Trebechivice pod Orebem, en Bohemia del Este, es de madera y tiene más de un siglo de antigüedad.

Malta es otro de los lugares de Europa que guarda una importante tradición belenística que comienza allá por 1617 en la iglesia de los Frailes Dominicos en Rabat aunque el Belén más antiguo que aún se conserva está en Mdina, concretamente en el Monasterio de San Pedro y se trata de un pesebre guardado por las Hermanas Benedictinas que viven en ese monasterio. Como sucede en España, en Malta hay una gran tradición belenística en las casas, tanto es así que cada año la Sociedad de Amigos del Pesebre de malta organiza una exposición de pesebres que te encantará disfrutar.

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