ENTRE ST. MORITZ Y ZERMATT
Glacier Express, el viaje en tren más inolvidable de los Alpes
El Glacier Express es uno de los trenes panorámicos más espectaculares de Suiza y del mundo. El viaje en él dura unas ocho horas, circulando a través de paisajes vírgenes por altas montañas, profundas gargantas y verdes valles de los Alpes suizos, y atravesando 90 túneles y 290 impresionantes puentes.
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El viaje comienza en St. Moritz y finaliza en Zermatt, pasando por las localidades de Brig, Disentis y Chur. La hermosa ruta, por la que atravesaremos 90 túneles y 290 puentes, discurre por las montañas de Graubünden -el nombre en alemán de los Grisones- y la región de Valais -con un impresionante paisaje glacial-ambas regiones del sur de Suiza.
Es un viaje de un día en un tren que se desliza sobre paisajes pintorescos y altas cumbres alpinas cubiertas de nieve, recorriendo un paisaje exuberante con prados de un verde rabioso, atravesando pintorescos pueblos, enormes lagos e impetuosos arroyos cuyo caudal se nutre de los hielos alpinos.
El Glacier Express atraviesa majestuosas montañas y se pueden observar dos que destacan por su altura: el Dom, que con sus 4.545 metros es la montaña más alta del territorio suizo, y el Piz Bernina, el único pico de cuatro mil metros de los Alpes Orientales. Atraviesa también el paso de Oberlap, el punto más alto del viaje con sus 2.033 metros de altitud.
El viaje prosigue contemplando el Parque Nacional de Suiza, en el cantón de los Grisones, que fue creado en 1909. En este parque todo continúa igual que hace cinco mil años ya que no se permite la caza ni la tala de árboles, e incluso no puede cortarse la hierba de sus verdes prados; ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco gracias a la labor realizada para conservar este tesoro ecológico.
Aunque viajando en un tren es difícil que podamos contemplar la flora y la fauna de sus tierras, siempre es un aliciente saber que se mantienen en su hábitat animales como la marmota, la cabra montesa, el águila real o el quebrantahuesos. Y es también un parte del sueño pensar que si paseáramos por sus montañas descubriríamos un edelweis, aquella flor que era homenajeada por los niños de la familia Trapp en la película “Sonrisas y Lágrimas”, protagonizada por la inolvidable Julie Andrews en 1965.
En las temporadas de primavera y otoño el Glacier Express procura otro aliciente: las semanas temáticas. Se puede disfrutar en el tren de tradiciones regionales y menús típicos de la región homenajeada, además de espectáculos folclóricos en las estaciones en las que el tren se detenga.
Entre septiembre y octubre se celebra la Semana de Valais. Los mejores cocineros del Gran Hotel Zermatterhof preparan el menú y se escogen vinos de cinco bodegas locales para degustar con el mismo. Se compone de sopa de calabaza y semillas tostadas, estofado de pata de ternera con salsa a la hierba de las montañas, raclette con polenta y judías verdes con tomate. Completa el menú la compota de ciruelas Valais con mousse de avellanas. La boca se hace agua sólo de pensarlo.
En primavera corresponde la Semana de los Grisones y se servirá un menú compuesto por delicias culinarias de esta zona: sopa de cebada caliente, selección de cecinas y quesos de la región, Capuns Sursilvans (rollitos de acelga) y exquisita tarta de nuez, postre obligado en la región.
Una experiencia gozosa para la vista y para el paladar, un descubrimiento de la belleza de las tierras, las tradiciones gastronómicas y folclóricas de estos típicos lugares suizos. Bon Voyage!
Más información:
Precios de los trayectos. Si viajamos en segunda clase el viaje de ida entre St. Moritz y Zermatt será de 93,10 €, y si lo hacemos en primera supone 154,70 €. Merece la pena viajar en primera, si nos lo podemos permitir, porque los vagones tienen un techo panorámico que nos permite tener una vista aún más espectacular de la ruta.
Una curiosidad para los amantes de los animales: no se permiten mascotas debido a que se ofrecen comidas en el Glacier Express; nuestros pequeños amigos no podrán acompañarnos en este viaje.
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