Publicidad

Marruecos, más allá de intrigas políticas y asuntos deportivos, es un país atractivo a rabiar aunque no a todos los viajeros les atraiga lo mismo y es que es también un país diverso en sus paisajes, enclaves históricos y naturales.

Para los amantes del cien clásico Marruecos es, por encima de todo, Casablanca; en cambio para quienes gozan del turismo de lujo y bienestar es Marrakech; si eres más de series que de películas seguro que Marruecos te suena a El Tiempo entre Costuras; y si cuando visitas un país revisas antes la lista de sus enclaves declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, querrás visitar las Medinas de Fez, Marrakech, Tetuán y Esauria o la Rabat, que es además la capital del país, entre otros lugares.

Fez
Fez | Pixabay

Pero volvamos al cine... ¿sabías que en Marruecos cuenta con unos estudios de cine por los que ha pasado la flor y nata de Hollywood? Están en Ouarzazate y allí se rodaron escenas de películas tan importantes en la historia del séptimo arte como Laurence de Arabia, Gladiator o La Guerra de las Galaxias entre muchas otras; además Ouarzazate tiene la particularidad de estar ubicada al otro lado de la Cordillera del Atlas y en la zona de Marruecos donde empieza el desierto; los paisajes aquí son de escándalo y en ellos descubrirás espectaculares palmerales y las famosas fortificaciones del desierto (kasbahs).

¿Más lugares de Marrecos menos conocidos de Marrakech, Tánger o Casablanca pero realmente dignos de una visita? ¡Muchos! Y entre ellos estos: Meknès, que fue capital de Marruecos después de Fez, aquí el Mulay Ismaíl hizo construir un inmenso palacio amurallado, su espectacularidad es tal que estamos ante uno de los lugares Patrimonino de la Humanidad de la UNESCO; también lo es la medina de Fez que ya hemos mencionado y a la que volvemos porque es la más grande y laberíntica del mundo, imperdible sin duda e imposible también no perderse en ella; Chaouen, la ciudad azul del valle del Rif; enclaves naturales imponentes como las cascadas de Ouzoud, las dunas de Merzouga (puro desierto) o las gargantas del Todra.

Volubilis
Volubilis | Pixabay

Lo que no todo el mundo sabe es que Marruecos no es sólo, en lo arquitectórico, artístico y cultural, árabe en general y bereber en particular (si hablamos de la zona del desierto), es también romano y buena muestra de ellos es Volubilis, el mayor y mejor yacimiento romano del país; es lo que se conserva de una ciudad fundada por los cartagineses que vivió, bajo el dominio romano, su época de mayor esplendor.

Viajestic» Destinos

Publicidad