Las mejores ciudades europeas para disfrutar de una gran nochevieja

Crecemos con la idea de que la última noche del año está para cenar con la familia, desear a los que más quieres unos 365 días siguientes maravillosos y llenarnos de cariño entre todos. Y es cierto: esta tradición es preciosa y la gran mayoría disfrutan verdaderamente de ella. Después, además, es habitual unirse a la fiesta que se forma en el pueblo o ciudad en la que te encuentres.

Pero desde hace un tiempo esto está empezando a cambiar. Son cada vez más las personas que deciden organizar un viaje de fin de año junto a sus parejas o amigos, con el objetivo de disfrutar de una Nochevieja diferente. En este sentido, el continente europeo es perfecto para ello, pues son muchas las ciudades que nos ofrecen una auténtica fiesta de despedida y de bienvenida, todo a la vez. A continuación, algunas de las mejores.

1. Londres.

Tenemos que empezar por la capital inglesa porque por todos es sabido que la Navidad en general y la Nochevieja en particular en la capital inglesa es perfecta. Fuegos artificiales a los pies del Támesis, la posibilidad incluso de realizar un paseo en barco por el río y una reunión de más de medio millón de personas que buscan lo mismo: disfrutar de esta noche al estilo londinense. Con música en directo, algo de frío y mucha magia.

2. Berlín.

Algo semejante ocurre en la capital alemana, como no podía ser de otra manera, donde un millón de personas se reúnen en torno a dos kilómetros de la ciudad (entre la Puerta de Brandenburgo y la Columna de la Victoria) para recibir el año nuevo con más fuegos artificiales, mucha cerveza y la mejor música.

3. Lisboa.

No hace falta irse muy lejos para disfrutar de una gran Nochevieja. Nuestro país vecino puede presumir de celebrar la noche de fin de año como pocos países son capaces de hacer, con Lisboa como centro principal de festividades. Los portugueses no comen las uvas, pero en Lisboa se reúnen igualmente en torno a la Plaza del Comercio para dar la bienvenida al año nuevo con champán, fuegos artificiales y la mejor de las fiestas.

4. Roma.

En Italia no hay campanadas como tal, pero después de comerte un buen plato de lentejas con una especie de salchicha de cerdo (sí, en Nochevieja en Italia se cenan lentejas) puedes disfrutar de muchos conciertos gratuitos y también de fuegos artificiales. Roma es uno de los destinos perfectos para disfrutar del espíritu navideño y en la última noche del año se sueltan el pelo: hay fiesta por todas partes.

5. París.

Otra gran capital europea que se transforma en Nochevieja y nos ofrece un plan para quien busca algo de tranquilidad. La Torre Eiffel pocas veces luce tan hermosa, con sus luces navideñas y la Fiesta de San Silvestre concentrando a miles de personas a su alrededor. Imperdible un paseo por los Campos Elíseos para disfrutar de la decoración navideña mientras tomas champán, justo antes de recibir el año nuevo. No os vayáis sin probar los papillotes.

6. Viena.

Lo que más llama la atención de la capital austriaca es, sin duda, el Gran Baile que se celebra en el Palacio de Salzburgo, pero lo cierto es que no siempre es posible acudir a él. Viena es, aun así, un lugar perfecto para disfrutar de la Nochevieja, cubierta de nieve y con ese Concierto de Año Nuevo ofrecido por la Orquesta Filarmónica que tan popular se ha hecho en todas partes. Es, como París, un destino para quien busca una cierta tranquilidad.

7. Madrid.

Tan acostumbrados como estamos a ver la capital española vistiéndose de gala para celebrar la entrada del nuevo año, parece que nos hemos olvidado de que es un destino perfecto para personas de todas las edades para disfrutar de una noche diferente. La tradición de tomarse las 12 uvas en torno a la Puerta del Sol, el gran ambiente que allí se forma y la fiesta posterior, localizada en diferentes rincones de la ciudad, convierten a Madrid en la ciudad perfecta.