Mezquita Kocatepe de Ankara: el curioso motivo por el que tuvieron que cambiar el proyecto inicial

Ponemos rumbo a Ankara, capital de Turquía. Se trata de una de las ciudades que más llama la atención a todo aquel que decide visitarla. Desde luego que no deja absolutamente indiferente a nadie. Es el momento de conocer la historia de una de sus construcciones más características.

Estamos hablando, cómo no, de la Mezquita de Kocatepe. Estamos ante la mezquita más grande de la capital de Turquía. Fue construida en el barrio que le da nombre, el de Kocatepe, entre los años 1967 y 1987. Al tener un tamaño considerable, es prácticamente visible desde cualquier punto del centro de la ciudad.

La Mezquita de Kocatepe, a través de su historia

Para conocer su origen, debemos trasladarnos a la década de los 40 del pasado siglo. Concretamente al 8 de diciembre de 1944. Aquel día, Ahmet Hamdi Akseki, como vicepresidente de Asuntos Religiosos de Turquía, junto a 72 socios fundadores, creó una sociedad para construir una mezquita en Yenişehir, Ankara.

Tan solo unos años después, en 1947, esta sociedad solicitó una serie de proyectos a varios arquitectos, pero no aceptaron ninguna de las propuestas presentadas. En 1956, Adnan Menderes logró, como primer ministro, que se destinaran varios terrenos para poder construir esta mezquita en Ankara.

Fue entonces cuando, un año después, se volvieron a solicitar varios proyectos. En total, llegaron a evaluar hasta 36. El elegido fue el presentado por Vedat Dalokay y Nejat Tekelioğlu, ya que consideraban que no solamente era innovador, sino también muy moderno. ¡Era exactamente lo que estaban buscando!

Precisamente por estas características, la construcción se paralizó en los cimientos por las fuertes críticas que recibieron por parte del sector más conservador de Ankara. Es por eso que Vedat Dalokay se vio en la obligación de construir una versión modificada del proyecto original. Y todo tras ganar un concurso internacional gracias a la Mezquita de Faisal, en el año 1969.

Debemos tener en cuenta que esta mezquita es una de las más sorprendentes que podemos encontrar en todo el planeta, y una de las que más fieles puede llegar a acoger. Es más, es considerada como la frontera de la arquitectura islámica moderna. ¡Nada más y nada menos!

Sea como sea, en 1967 se llevó a cabo un tercer concurso. En esta ocasión, se decantaron por un diseño mucho más conservador, como era el de M. Fatin Uluengin y Hüsrev Tayla. La construcción finalizó en 1987 y presentaba un estilo otomano neoclásico inspirado, claramente, en la Mezquita de Selim de Edirne, pero también en las Mezquitas Azul y Sehzade que podemos encontrar en la ciudad de Estambul.