MUDANZA
¿Te mudas a París? Manual de supervivencia sobre la ciudad de las luces
Irse a otro país a vivir es una experiencia muy bonita en la vida pero que implica tener muchas cosas en cuenta para poder hacer la mudanza de forma adecuada y que el país te acepte.
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Mucha gente se muda a diferentes ciudades a lo largo de su vida, pero no es lo mismo irse a una ciudad de tu mismo país que a otra que está en otros lugares. Debido a que Madrid es una de las ciudades favoritas para mudarse hace unas semanas os dijimos el manual de supervivencia que debéis tener en cuando os mudáis a la ciudad que nunca duerme.
Pero hay otras ciudades de otros países que son irresistibles para personas que toman la decisión de irse de su país y una de ellas es París. Por eso, os vamos a dejar algunas cosas que debéis tener en cuenta si vais a vivir en la ciudad de las luces.
Alojamiento
- Inmobiliaria: Es una opción muy buena ya que es muy fiable, el problema está en que te piden una garantía, trabajar mínimo 1 año, ganar 3 o 4 veces más de lo que cuesta la casa o tener visas de larga duración y muchos requisitos más.
Por eso, lo mejor para la primera vez que vives en París es compartir piso o buscarlo en diferentes portales.
- Facebook: Hay muchos grupos en los que publicitan apartamentos y habitaciones compartidas en los que verás una amplia oferta como es el caso de Wantedbonplans.
- Leboncoin: Es un portal que es un mercado libre y si te metes en la sección de alquiler de apartamentos podrás ver los diferentes anuncios.
- Properstar: Es una página web en la que puedes ver todos los apartamentos que hay disponibles en París. Además, puedes ver donde están situados para mirar la zona que más te guste para vivir.
Actividades para hacer
-Torre Eiffel: Aunque es un plan muy típico es la mejor forma de conocer la ciudad y ver el sitio más especial de la ciudad. Puedes dar un paseo y esperarte a que anochezca para verla iluminada.
- Crucero por el Sena: Es una cosa que puedes hacer para ver desde un punto de vista diferente en la ciudad ya que pasarás por distintas partes de París.
- Comerte una crêpe o un croissant: Ir a un puesto o a una boulangerie–pâtisserie hará que saborees el típico dulce del país que te dejara con un buen sabor de boca y te endulzara el día por una de las ciudades más bonitas de Europa.
Documentación Imprescindible
- DNI o pasaporte: Las personas que se muden desde países como España pueden moverse libremente por países que pertenecen a la Unión Europea.
- Visas: En Francia existen diferentes tipos de visas que puedes solicitar desde el país de origen y tardan unos meses en dártelas. La visa que más se suele pedir es la Working Holiday que es un visado que va dirigido para personas de entre 18 y 30 años. Las condiciones que debes cumplir es que tienes que residir un año en el país y no puedes renovar después de los 12 meses.
- Carta Vitale: Es imprescindible para muchos trabajos ya que es la seguridad social financiada por el Estado. Gracias a ella te puedes beneficiar de indemnizaciones, aportes jubilatorios, te cubren medicamentos y tratamientos.
Transporte
- Trasporte público: La mejor opción es el metro ya que puedes moverte de una punta a otra de la ciudad sin ningún problema. Al igual que en Madrid las líneas se diferencian por colores, pero están numeradas. Según el pase que tengas el precio varía ya que hay pases diarios, semanales y mensuales. Con los billetes del metro también puedes acceder a los trenes de cercanías y a los autobuses del centro. El pase simple tiene un precio de 1,90 euros, aunque hay otras opciones de viaje. El servicio de transporte publico funciona de 05:30h hasta la 01:00h.
- Bicicletas: El sistema de bicis de la ciudad se llama Vélib’ y para poder usarlas debes crearte un usuario en su página web oficial. Existen distintos abonos que tienen diferentes precios ya que el anual cuesta 29 euros, el ticket de un día tiene un precio de 1,70 euros y el de la semana de 8 euros. La duración de los viajes es ilimitada y la primera media hora de cada trayecto es gratis.
Clima
El clima en París tiene unos veranos calurosos que hacen que los termómetros marquen temperaturas muy altas a lo largo de esos meses que rondan entre los 20 y 35 grados. Sin embargo, los inviernos son fríos ya que el termómetro puede marcar 0ºC y la máxima 10ºC, hay más lluvias e incluso cabe la posibilidad de que nieve, aunque la probabilidad es muy baja.
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