Murallas de Dubrovnik: Todo lo que debes saber de este símbolo de Croacia

Es más que evidente que Croacia se ha convertido en uno de los países más visitados de los últimos tiempos. Y es que ha conseguido captar la atención de miles de turistas en todo el mundo. Uno de los grandes atractivos que podemos encontrar en este país son, sin lugar a dudas, las Murallas de Dubrovnik.

Estamos ante uno de los monumentos más conocidos de Croacia actualmente, y parte de la “culpa” de esto lo tiene la histórica serie ‘Juego de Tronos’. Y es que escogieron estas Murallas de Dubrovnik como escenario para grabar un gran número de escenas. Un lugar mágico que consiguió ser Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO en el año 1979.

Una cuestión a tener en cuenta es que, desde las murallas, tenemos una perspectiva absolutamente espectacular de Dubrovnik. Por ese mismo motivo es muy recomendable acudir a este lugar aunque el precio, en muchas ocasiones, sea elevado. Pero prometemos que merece muchísimo la pena.

Cabe destacar que una de las grandes ventajas que podemos encontrar en las Murallas de Dubrovnik es que, gracias a ellas, podemos recorrer todo el perímetro de la ciudad. Por lo tanto, podemos tomar unas fotografías verdaderamente espectaculares desde todos los ángulos posibles. ¡No tiene desperdicio!

¿Cuál es la historia de las Murallas de Dubrovnik?

Su construcción data del siglo XII, aunque posteriormente se decidió reforzar por dos cuestiones fundamentales. Por un lado, la independencia de la República de Venecia. Por otro lado, el arquitecto Micchelozzo di Bartolomeo quiso proteger la ciudad, en el siglo XVI, tras la fuerte amenaza otomana desde que en el año 1453 cayera Constantinopla.

¡Pero no todo queda ahí! Dubrovnik fue bombardeada durante el conflicto de la guerra entre Serbia y Montenegro. Esto hizo que gran parte de la estructura de las murallas quedara completamente dañada. Mucho más, incluso, que el terremoto que tuvo lugar en el año 1667. Ahora bien, la reforma que se llevó a cabo fue tan meticulosa que apenas se aprecia que hubo algún tipo de destrozo.

Otra cuestión a tener en cuenta es que estas murallas, a lo largo de la historia, han sido de lo más eficaces. Tanto es así que, hasta 1806 cuando las tropas de Napoleón se hicieron con la ciudad croata, fue absolutamente inexpugnable. Este control tan solo duró, aproximadamente, 8 años. Fue exactamente lo que tardaron las tropas rusas, así como las del Imperio Austrohúngaro, en reconquistar el lugar.

Si nos centramos en datos, las Murallas de Dubrovnik pueden llegar a tener unos 35 metros de altura, de un grosor de metro y medio. Lejos de que todo quede ahí, el perímetro no llega a superar los 2 kilómetros. Por lo tanto, estamos ante uno de los trabajos más meticulosos en cuanto a ingeniería militar se refiere. Lo más impresionante de todo es que, además de sus muros, también se conservan a la perfección tanto torres como fortalezas y bastiones.