PORTUGAL
Oporto también es la ciudad de los puentes
Oporto es una ciudad preciosa de la que cabe destacar infinidad de aspectos entre los que están, sin duda, sus puentes sobre el río Duero.
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Oporto no deja indiferentes a sus visitantes jamás, ni aunque llegues a ella después de haber pasado por Lisboa dejará de sorprenderte y enamorarte; nos atrevemos a decir más: aunque llegues a Oporto por carretera después de haber haber llegado a Lisboa cruzando el famoso puente 25 de abril dejarás de maravillarte ante los puentes que cruzan el Duero en la segunda ciudad más grande de Portugal, Oporto (entre otras razones porque podrás disfrutar de estos puentes pasando bajo ellos, sobre ellos, viéndolos desde la ribera del río e incluso desde un helicóptero...
Y cuando hablamos de puentes no hablamos de dos ni de tres sino de seis puentes sobre el río Duero, seis puentes que unen la vieja y decadente a la par de vital y bellísima ciudad de Oporto con Vila Nova de Gaia, tierra de bodegas y catas de vino de Oporto; puedes cruzar estos puentes en coche, en tren (tranvía) e incluso andando pero el modo de verlos y cruzarlos todos en poco tiempo es en barco, navegando bajo ellos en una embarcación típicamente portuguesa.
Estos pequeños cruceros, de apenas una hora de duración y aptos para todos los bolsillos (15 euros por persona y una copa de Oporto para coronar la experiencia), salen de ambas orillas del río pero nuestra recomendación es que cruces andando o en tren el puente de Don Luis I a Vila Nova de Gaia y contrates allí tu crucero ¿por qué? Porque te encantará desembarcar y caminar apenas unos metros hasta alguna de las bodegas más emblemáticas en la que catar una copa de vino de Oporto.
Pero vayamos a lo que nos ocupa hoy: ¿cuáles son los seis emblemáticos puentes sobre el río Duero que podemos ver en Oporto? A continuación te los presentamos del más antiguo al más moderno de todos ellos:
Puente de María Pía
Inaugurado en 1877, fue el primer puente ferroviario que unió Oporto con Vila Nova de Gaia y estuvo en funcionamiento hasta el año 1991, año en el que se inauguró un nuevo puente sobre el Duero en Oporto, el puente de Sao Joao. Este puente, el de María Pía, fue diseñado por Gustave Eiffel y es un puente en arco construido en hierro colado y acero; su longitud supera los 560 metros.
Puente de Don Luis I
Este puente fue inaugurado en 1886 y es el más icónico de Oporto, es de hecho uno de los puentes más famosos del mundo: tiene dos niveles, uno para el metro y otro para los coches, ambos son accesibles para los peatones; este espectacular puente fue diseñado por el ingeniero alemán Théophile Seyrig, un socio de Gustave Eiffel y es un puente en arco con dos niveles construido en acero ¿longitud? Algo más de 385 metros.
Puente de la Arrábida
Fue inaugurado en 1963 y, en aquel momento, era el puente de arco de hormigón con el mayor vano del mundo; se trata de un puente moderno que conecta las autopistas y al norte y al sur del Duero. Su longitud supera ligeramente los 2 kilómetros. Este puente, diseñado por el ingeniero Edgar Cardoso, fue declarado Monumento Nacional de Portugal en mayo de 2013.
Puente de Sao Joao
Este puente se construyó para sustituir al antiguo puente de María Pía, fue diseñado, como el de la Arrábida, por el ingeniero Edgar Cardoso y es particularmente famoso por su estructura y su eficiencia: no se trata de un puente de arco como otros puentes de Oporto sino de un puente en pórtico múltiple continuo y con tres vanos. Su longitud supera el kilómetro.
Puente del Freixo
El puente del Freixo fue inaugurado en 1995 con la intención de descongestionar los puentes que salen del centro de Oporto (es el puente más al este de los más cercanos al centro de la ciudad); es un puente de poco más de un kilómetro de largo con 8 vanos y otros tantos carriles (cuatro de entrada y cuatro de salida).
Puente del Infante Don Henrique
El puente del Infante, inaugurado ya en el S.XXI (en 2003) se proyectó y construyó para aliviar el tráfico del puente de Don Luis I; es un puente de hormigón y 370 kilómetros de largo.
Por supuesto el puente que no te puedes perder, el que tiene que cruzar por arriba y por abajo, caminando y en metro, es el de Don Luis I y eso sabiendo que, como reza la placa que descubrirás en su ribera al cruzarlo por su parte superior: el puente tiembla al ser cruzado por una multitud...
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